Jóvenes borrachos lesionan a un adulto mayor y causan destrozos
En su borrachera un par de jóvenes que iban a bordo de un auto compacto, no sólo lesionaron a un hombre de 80 años en una de sus piernas, sino que además derrumbaron el portón de una casa, dañaron dos autos estacionados y una moto, así como causaron daños al cuarto de servicio
de la vivienda en la que terminaron su loca carrera, ubicada en la colonia Insurgentes de esta ciudad.Los hechos se reportaron al filo de las 07:20 horas de este domingo, cuando Carlos Alberto Martínez Reyna de 21 años de edad en compañía de un amigo, ingerían cerveza a bordo de un Automóvil Buick de color gris, placas 501-SSD del Distrito Federal, mientras circulaban por calles de la colonia Insurgentes.
Pero al dar vuelta en una privada de esa colonia, conocida como J. Mariano Jiménez y a exceso de velocidad, el conductor se encontró con que una persona de la tercera edad atravesaba la calle, y aunque intentó evitar atropellarlo, éste no pudo y acabó por impactar en una de sus piernas a quien más tarde se identificó con el nombre de Nicolás Ramírez Dávila de 80 años de edad, vecino de la calle.
Por esquivarlo, el chofer responsable perdió el control de su vehículo, y el carro se le va hacia la izquierda chocando contra una casa de esa privada, la vivienda marcada con el número 3, donde el portón eléctrico de aluminio fue derribado con todo y alarma contra robo.
Pero más adentro había dos vehículos estacionados, una camioneta Mazda modelo 2008, color azul, placas TVX-9403 y un automóvil Matiz, modelo 2011 de color gris y placas TWY-5742, los cuales fueron golpeados por el compacto del ebrio conductor.
Pero por si fuera poco, entre el Matiz, que terminó hecho sándwich con una pared, había una moto Harley Davisón, modelo 2010, que sale impactada de un costado y rompe la pared del cuarto de lavado, tirando el lavadero, los tanques de gas y otros enseres que ahí se encontraban.
Tras la brutal colisión, el chofer intentó darse a la fuga poniendo en reversa la unidad, pero su unidad se atoró y sólo patinaba. Debido a ese ruido del rechinar de las llantas, fue lo que levantó a los dueños de la casa allanada y destrozada, así como también alertó a los vecinos, quienes salieron a ver qué sucedía, encontrándose con la escena trágica de ver media vivienda destrozada.
Es justo en ese momento que el amigo del conductor responsable abrió la puerta y huyó del lugar, más Carlos Alberto no pudo abrir la puerta de su lado ya que esta estaba atorada entre el portón y la camioneta y al intentar salir por la puerta del copiloto fue asegurado. Dentro del vehículo se pudo observar al menos una cerveza caguama en el piso.
Por su parte el señor Nicolás, quien se encontraba tirado en el pavimento fue auxiliado por vecinos y momentos más tarde por paramédicos de la ambulancia SUMA número 028 con una probable fractura en la pierna derecha y fue trasladado al Hospital UPAEP.
Carlos Alberto fue entregado para su custodia a oficiales de peritos de vialidad de la patrulla TDP-02 y dentro de la unidad se puso a llorar, por lo que hizo al estar ingiriendo bebidas alcohólicas desde muy temprana hora.
