Crimininalización

Joven cholulteca víctima de la criminalización policíaca
Ricardo Cadena Becerra, el mayor de tres hermanos, fue enterrado este lunes por su familia y amigos luego de que la madrugada del domingo fue asesinado durante una persecución policíaca por parte del subdirector de la Policía municipal de San Pedro Cholula, quien con su arma de cargo perforó la nuca del joven cuando éste presuntamente huía para no ser detenido por el supuesto delito de “grafitear una barda”. Debe señalarse que el homicida justifica su actuación al señalar que forcejeó con la víctima.


El joven, de apenas 18 años de edad, cursaba el tercer grado en el bachillerato Sara María Basave de Toxqui en esa demarcación, fue víctima de la criminalización por parte de las autoridades municipales, que con arma en mano buscaron detenerlo a él, a su amigo Hermenegildo, también de 18 años y a su hermano Jonathan, de sólo 15 años de edad, cuando presuntamente grafiteaban una barda minutos después de haber abandonado un botanero donde habrían visto una pelea de box la noche del sábado. Lo que nadie ha dicho es la corrupción de autoridades y de hacer caso omiso a las denuncias constantes de que en los bares cholultecas se permite el acceso a menores de edad, como es el caso de que los tres jovenes, uno menor de edad y los otros dos sin documento oficial que los identificara como mayores se les permitiera ingerir bebidas embriagantes hasta las 2 de la madrugada en un lugar céntrico y a la vista de las propias autoridades que se hacen de la vista gorda.

En entrevista para diarios locales, Francisco Cadena Hernández, carpintero de oficio y padre de la víctima, explica que a pesar de que el edil cholulteca José Juan Espinosa se acercó para ofrecerles cubrir los gastos funerarios en su negocio, ellos se negaron y afrontarán la inversión que representa la velación y el entierro que tendrá lugar este día en un cementerio de la localidad.

Guadalupe Becerra López, madre de la víctima, recibe a todas las personas que llegan al velorio de su hijo llevado a cabo en el patio de un taller mecánico aledaño a su vivienda; mientras toma su lugar junto al féretro de su primogénito Ricardo, narra la importancia y el cariño que le tenían a pesar de que era un niño inquieto y juguetón, además de que apenas había cumplido su mayoría de edad pues celebró su cumpleaños número 18 en familia el pasado 26 de abril. Lo tenía yo enfermo, le daban ataques epilépticos a mi hijo desde hace dos años, entonces empezó a dejar la patineta y poco a poco empezó a dejar la bicicleta por lo mismo de su enfermedad pero eso no le impedía andar ahí corriendo”, mencionó sin profundizar en el tema de su estado de salud.

Grafitear no da derecho de matar a alguien por la espalda
Acompañada de los compañeros de clase de Ricardo y de vecinos con los que creció, la mamá pide justicia durante el velorio y que se hagan revisiones a fondo para los agentes que se encuentran bajo la encomienda de cuidar a la ciudadanía, pues la criminalización por tomar una cerveza o salir de noche no es un motivo para disparar en contra de alguien.

“Pido que se haga justicia porque cuántos jóvenes no hay en la calle, cuántos jóvenes se quieren acabar el mundo en un día porque quieren ir, bajar y subir, y que tengamos esos guardias pues ya no es confiable porque se van a tomar dos o tres cervezas y los policías los van a asesinar, pues creo que no. Y de que andaba grafiteando no le da derecho de quitarle la vida a mi hijo y menos por la espalda”, exigió la señora Guadalupe.

A mi hijo lo mataron con un disparo en la nuca: padre

Por su parte, Francisco Cadena Hernández, padre de la víctima, indicó que el cuerpo de su hijo les fue entregado a las 11 de la noche del domingo y que de acuerdo con las causas de la muerte, asentadas en el acta de defunción, fue una “herida por disparo de proyectil de arma de fuego. Penetrante de cráneo con laceración de cerebelo y encéfalo”.

“Me muestran unas cosas para identificarlo y me doy cuenta que sí, identifico que son sus pertenencias. Me dicen que a mi hijo le habían disparado, le dispararon en la nuca”, además ratifica la versión de que Ricardo fue ultimado a la distancia y mientras corría para no ser detenido, y no como producto de un forcejeo como lo indicó el agresor y subdirector de la Policía municipal de San Pedro Cholula.

Después de sepultar a Ricardo Cadena Becerra, joven asesinado por el Subdirector de la Policía Municipal de San Pedro Cholula, los familiares se dirigieron a la presidencia de dicho municipio para dejar una corona de flores y solicitar justicia, reclamo que fue atendido por el alcalde José Juan Espinosa para dar los pormenores de la investigación.

Al menos una centena de familiares y amigos acudieron a protestar a la alcaldía y para dejar una ofrenda de flores, veladoras y pancartas con  exigencias de Justicia.

Momentos más tarde llegó el presidente municipal José Juan Espinosa, que recibió reclamos y exigencias para actuar conforme a Derecho y no liberar al Subdirector de la Policía Municipal quien confesó haber disparado contra el joven, aunque en sus declaraciones indicó que se trató de un forcejeo y no de un exceso policíaco.

Familiares como la abuela y el tío de Ricardo Cadena, exigieron al edil que no actuara con tibieza ante la crisis social que representa la muerte del estudiante de 18 años, además de reiterar que "no era un grafitero y aun así, no era motivo para ser asesinarlo por la espalda".

El edil se comprometió a atender el caso personalmente, por lo que citó a los familiares para sostener una reunión este miércoles en las instalaciones de la presidencia.