Publicidad erótica

Casi desde que empezó la publicidad se ha utilizado el desnudo y elementos eróticos para llamar la atención y despertar interés en los productos que se publicitan.

Esta práctica del “marketing erótico” está muy relacionada con la publicidad subliminal ya que aunque en la mayoría de las campañas se siguen algunos principios y una determinada ética moral, en ocasiones se hace uso de la sexualidad, que no se aprecia a primera vista por lo que llega a nuestro subconsciente, es como si apareciera oculto, pero lo cierto es que está ahí.

Aunque generalmente es el cuerpo femenino el que protagoniza las campañas, hoy en día, es más frecuente ver torsos masculinos bien definidos para llamar al público femenino.

En mi opinión, es un tipo de publicidad que, a pesar de su esencia primaria, sigue funcionando y hace que el público objetivo recuerde la campaña publicitaria. Algunas incluso rebasan los límites llegando a la censura por lo que consiguen un efecto viral ya que se convierten en el centro de polémicas y discusiones.