2016 0713 | Al menos 121 pozos de este municipio registran altos niveles de contaminación generada por la mala operación del relleno sanitario intermunicipal de Huejotzingo, ubicado a unos 12 kilómetros de distancia, acusó el alcalde José Juan Espinosa Torres.
Basado en los estudios que sustentan el Atlas de Riesgos de San Pedro Cholula terminado hace medio año y presentado hasta este medio día, el edil exigió el cierre inmediato y clausura del depósito operado por la familia Abed Rounaett, con quienes sostiene serias diferencias desde hace dos años, tras cancelarles la concesión del servicio de limpia.
“Nos preocupa el manejo irresponsable de la basura en la zona metropolitana”, manifestó, al señalar que su administración emprenderá acciones legales contra los responsables del relleno sanitario intermunicipal de Huejotzingo por los daños ambientales causados a San Pedro Cholula, en este caso al agua extraída de 121 pozos, 67 de uso agrícola, 9 domésticos, 2 industriales y un pecuario.
Al mismo tiempo, llamó a las autoridades estatales y federales, así como de Huejotzingo a retomar el descubrimiento hecho por su ayuntamiento para sumarse a la denuncia y frenar la contaminación de los mantos acuíferos que, no solo sirven para regar los sembradíos, sino que también abastecen de agua potable a los habitantes de la región.
Espinosa Torres explicó que la empresa Política, Sociedad y Análisis analizó los mantos freáticos de Cholula con la intención de detectar un posible riesgo para la población. “Lamentablemente se detectaron altos niveles de contaminantes que nos obligan a tomar decisiones inmediatas para preservar nuestros recursos naturales”, subrayó.
Los contaminantes provienen de las filtraciones del relleno sanitario de Huejotzingo –situado a unos 12 kilómetros de distancia- como resultado de un deficiente manejo de los residuos líquidos generados por la descomposición de los desechos sólidos.
Incluso, recordó que el ayuntamiento de Huejotzingo solicitó un dictamen técnico para verificar si los administradores del relleno sanitario intermunicipal cumplían con las normas de manejo de lixiviados y biogases, compactación de residuos y la aplicación de un manual de operación.
Dicho análisis concluyó que incumplían con todos los requerimientos, por lo cual el gobierno estatal debió impedir su funcionamiento.
