Mier y sus nuevos nigromantes
¡Ora’, cabrón…si no vendo tlacoyos!
Arturo Rueda, (a) el Nigromante.
Los voceros de Ignacio Mier (e-consulta y los empleados de Fernando Manzanilla) manipulan la información. Desde la semana pasada han querido hacer del (¿ex?) priista una vĆctima. Han intentado vender la idea que hay una guerra abierta entre Miguel Barbosa y el diputado federal de Morena.
¿La intención?
Pulverizar las investigaciones que hay contra su hijo por el caso del asesinato de tres ministeriales en manos de su exjefe de seguridad pública; contra su sobrino Moisés Villaverde, por enriquecimiento inexplicable y contra su socio Arturo N., quien ya lleva tres meses en la cÔrcel, por el presunto delito de extorsión.
Lo que sus matraqueros no dicen es que la guerra la inició el propio Mier desde el año pasado, cuando el también protegido de Manuel Bartlett se quiso apropiar de su partido en Puebla y cuando firmó su alianza con Fernando Manzanilla; sin olvidarnos que de vez en cuando su periódico Cambio atacaba al mandatario estatal. No hay que soslayar que el propio Rueda amenazó públicamente al gobernador poblano cuando se desató el escÔndalo #OperaciónAngelópolis y Mier, por supuesto, lo permitió.
Mier no sólo llora escondido por los rincones —como la muƱeca fea de Cri-Cri— sino que trata de convencer a todos que Ć©l es el elegido por el dedazo de López Obrador y ha contratado, segĆŗn nos cuentan, al consultor polĆtico Roberto Trad para hacer no solo la precampaƱa sino la guerra sucia contra sus adversarios.
Lo que sus nuevos nigromantes tampoco nos dicen es que algunos de ellos tienen el agua hasta el cuello. No han querido armar el rompecabezas que tienen enfrente: la semana pasada fue evidenciado en pĆŗblico el presidente del Tribunal de Justicia por su pĆ©simo desempeƱo al frente del Poder Judicial (se presume complicidades y trĆ”fico de influencias a favor de su (¿ex?) jefe Antonio Gali).
AdemÔs, el miércoles por la noche, nos enteramos de que fue llamado a declarar Pedro Gómez a quien se le acusa de encabezar una campaña de terror en redes sociales para desestabilizar a los poblanos y ponerlos en contra de la administración estatal.
Pedro Gómez, quien habĆa dicho que ya no le interesaba Puebla, despuĆ©s de que fue corrido de la administración estatal, en la realidad ha estado muy activo, pues hasta se le vio comiendo, la semana pasada, en el restaurante Azur con un conocido empresario radiofónico.
Y es que si le rascan mÔs al caso Pedro Gómez-Manzanilla saldrÔn a relucir ligas con Claudia Rivera y su alineación de chakras, algunos aspirantes a periodistas, grupos paralelos y hasta ex funcionarios del gobierno de Gali que estÔn ahà armando todo su entramado para llevar a Nacho Mier a la gubernatura y por el dedazo presidencial, faltaba mÔs.
Algunos han jurado lealtad a Eduardo Rivera, pero en realidad operan para el “elegido por dedazo del presidente”.
Los nuevos defensores del tal Mier, tampoco han leĆdo con detenimiento la columna del lunes de Alejandro Mondragón, quien vaticinó una limpia de estructuras que han jugado doble. AsĆ como la que escribió Ricardo Morales en la pĆ”gina Efekto Diez, quien detalla la guerra encabezada por Manzanilla —y su nueva pareja— y las ligas que mantienen con los grupos antibarbosistas. Ambas aportaciones periodĆsticas son necesarias para entender lo que ocurre y ocurrirĆ” en Puebla en los próximos meses.
El propio gobernador dijo en una de sus mÔs recientes mañaneras que en el combate que inició contra la corrupción ha despedido e iniciado investigaciones contra gente hasta de su administración que se quiso aprovechar de sus puestos para sacar ventaja, dinero y prebendas.
Pero los porristas de Mier solo ven la corrupción en el ojo ajeno y nunca la viga que ya sabemos dónde la cargan.
Primer acto
Quien bautizó a Rodolfo Ruiz como “Candy man” porque supuestamente le pidió a Pedro Gómez “dulces” (dinero) fue Arturo Rueda, socio de Ignacio Mier.
Segundo acto
Quien siempre acusó, denostó, humilló y se burló de Ruiz fue Rueda, socio de Mier, en el periódico de ambos.
Tercer acto
Hoy, el Nigromanteruiz, como lo llamó atinadamente el periodista Ćlvaro RamĆrez, es el principal defensor y promotor de Mier, socio de Arturo Rueda.
Adenda
—¿En quĆ© periódico evidenciaron a Pedro Gómez porque supuestamente actuó contra sus jefes?
—Ah sĆ, claro, en Cambio, de Ignacio Mier.
—¿Y la dignidad de todos ellos?
—Muy bien gracias, ya comió.
Hipócrita Lector // https://hipocritalector.com/vicios-ocultos/mier-y-sus-nuevos-nigromantes/