El Doctor Muerte



Glockner, las segundas partes no son buenas
Una historia que se repite, la de Martín Rzepka; un villano con pinta de héroe



Texto y foto / Alfonso Ponce de León Salgado / Diario Intolerancia

La mañana del viernes 30 de julio de 1987, la nota principal de la sección de Policía de El Sol de Puebla detallaba la detención de un grupo de médicos cuya ganancia principal se centraba en el negocio de los abortos.

Entre los detenidos de mayor importancia, por el dinero que habían acumulado en esta felonía, además de lo histórico de su apellido, se encontraba el doctor Martín Rzepka y Glockner, quien presumió de ganancias de 29 millones de pesos (antes de la reducción de ceros) mensuales.

La nota del periodista especializado en la información policiaca, Alfonso Molina Camacho, detalló el resultado de ocho días de investigación realizada por elementos de la Segunda Comandancia de la Policía Judicial del Estado (PJE), dirigidos por el comandante Alejandro San Pedro, que dejó la desarticulación de al menos ocho consultorios dedicados a interrumpir embarazos, entre ellos figuraban Ana María Pintado Hernández y Consuelo Robles Tovar, además de Glockner.

Martín Rzepka fue acusado por la Procuraduría General de Justicia, (PGJ), a través de la Segunda Mesa Investigadora del Ministerio Público de practicar abortos, amén de que en su consultorio, en ese entonces ubicado en la 18 Sur 2124, le encontraron fotografías de algunas de sus pacientes, de quienes, aprovechando que estaban anestesiadas, las acomodó en poses eróticas.

Los investigadores presumieron que las jóvenes que aparecían en esas fotos pudieron haber sido chantajeadas por el médico cirujano, otros que las utilizaba para sus deleites mentales personales, al final no hubo quien lo acusara de chantaje y sólo quedó como un enfermo que se divierte con sus pacientes. Martín Rzepka, “El Doctor Muerte” o “El Benefactor de la Sociedad”, la primera vez que fue detenido estaba practicando un legrado a una joven oriunda de Huauchinango.

La sorpresiva incursión de los agentes judiciales —que carecían de una orden para poder ingresar— evitó que pudiera desaparecer el producto que había extraído del vientre de su cliente, a quien previamente le había cobrado 70 mil de los viejos pesos.

Contraria a la nota publicada en Diario Intolerancia, el periódico digital Quinta Columna publicó en octubre de 2007 favor del médico lo siguiente:



Detienen a doctor de manera arbitraria

  • Convoy de judiciales lo acusaron de practicar abortos; salió con 130 mil pesos de fianza

Edmundo Velázquez

Alrededor de la una de la tarde los agentes de la Judicial abordaron de manera violenta al galeno y a su abogada, Iliana Lucero. Presentaron una credencial sobre el parabrisas de la camioneta Volkswagen modelo Tuareg que conducía el doctor. Aseguraron a ambos e intentaron extorsionarlos, según relató la propia abogada

Sin orden de aprehensión ni de presentación, la Policía Judicial detuvo al doctor Martin Rzepka Glockner el sábado pasado, acusado por practicar legrados.

Alrededor de la una de la tarde los agentes de la Judicial abordaron de manera violenta al galeno y a su abogada, Iliana Lucero. Presentaron una credencial sobre el parabrisas de la camioneta Volkswagen modelo Tuareg que conducía el doctor. Aseguraron a ambos e intentaron extorsionarlos, según relató la propia abogada.

Ambos fueron detenidos por cuatro agentes y llevados en un automóvil Chevrolet, modelo Chevy y un Pointer Volkswagen a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia en la 31 Oriente y boulevard Héroes del 5 de Mayo y después fueron trasladados hacia la agencia especializada en Delitos Sexuales ubicada en la 12 Oriente en el Centro Histórico.

En la agencia del Ministerio Público notaron que la abogada nada tenía que ver en el caso y aplicaron el común “usted disculpe” y la liberaron. Pero al doctor le comenzaron cargos por cohecho, pues los judiciales hicieron pasar la extorsión como una oferta de dinero.

En la agencia especializada se argumentó que tenían pruebas de dos abortos realizados por el doctor Martín R. Glockner, pero incluso los abogados defensores del galeno presentaron pruebas de que los casos se trataron de biopsias y la limpieza de una mujer que presentó un aborto natural.

“Tenemos todos los documentos, ultrasonidos incluso, todo lo que avala que el doctor no practica ni ha practicado ningún legrado”, comentó irritada la abogada del galeno.

En su declaración, los judiciales aseguraron que el doctor intentó extorsionarlos mientras los defensores agregaron pruebas que dejaban claramente especificado que los dos casos de los que se acusaba no habían sido más que prácticas rutinarias.

“Al parecer le quisieron achacar este tipo de cosas porque en un programa de televisión apareció hablando a favor del aborto. En la televisora (Televisa Puebla) lo invitaron a un foro donde se habló del tema por la polémica de la autorización en el Distrito Federal, pero él no se dedica a eso, es solamente víctima de un atropello”, comentó una de las amigas del doctor que tuvo contacto con Cambio para denunciar su desaparición.

El doctor pasó la tarde y noche en calidad de presentado, fue liberado alrededor de las 4 de la madrugada después de pagar una fianza en la agencia del Ministerio Público de al menos 130 mil pesos. Por la naturaleza poco legal de su detención, sin orden de presentación ni de arresto, sus abogados analizan contraatacar a la Procuraduría General de Justicia en el estado por secuestro.

Sobre el tema, en rueda de prensa de la PGJ, Hugo Isaac Arzola Muñoz, jefe de la Policía Judicial, se deslindó de comentarios y aseguró que en todo caso quien debía explicar sería la correspondiente agencia del Ministerio Público. Tras la parca respuesta el funcionario abandonó el auditorio de la Procuraduría sin más explicaciones.