Toma de juzgado de paz origina hechos violentos en Huapalegcan

El pasado 27 de mayo habitantes y el juez electo sellaron el acceso
Darío Cruz Martiñón / Síntesis


Xochitlán de Vicente Suárez. Brotes de violencia se registran en este municipio, luego de que en la comunidad de Huapalegcan, el martes 27 de mayo habitantes y el juez de paz electo Melchor Manuel Manzano tomaron el juzgado de paz y sellaron el acceso con soldadura, además de que el gobierno municipal denuncia la actividad de grupos subversivos que pretenden desestabilizar a Xochitlán en al menos cinco localidades de la región.

Desde el 15 de mayo, habitantes de Huapalegcan se manifestaron frente a su juzgado de paz para pedir elecciones limpias para la sucesión de su nueva autoridad, y a pesar de que obtuvo el triunfo Melchor Manuel Manzano, su gente se presentó al juzgado y con apoyo de un herrero sellaron la puerta metálica.


Luego de estas acciones el presidente municipal Manuel Arroyo Guzmán pidió a los inconformes un diálogo que hasta el momento no ha aceptado la gente de Manuel Manzano.


El alcalde dijo que la toma de este juzgado forma parte de una estrategia de un grupo de personas molestos por el triunfo del Partido Acción Nacional (PAN) en Xochitlán, acciones que dijo también se presentaron en la elección de la junta auxiliar de Huahuaxtla y ahora se ha llevado este ambiente de enfrentamiento en otras comunidades del municipio.


Manifestó que con el objetivo de liberar el juzgado se mandó llamar a los inconformes a la presidencia municipal, pero no aceptaron manifestar sus inconformidades y hasta el momento los servicios permanecen suspendidos en Huapalegcan, lo que aseguró es una clara muestra de que no les interesa resolver el conflicto, sino generar un ambiente de enfrentamiento entre la gente, algo que dijo es una lástima porque esta gente realiza acciones contrarias al bienestar y desarrollo del municipio.


Arroyo Guzmán dijo que el ayuntamiento reconoce el triunfo de Melchor Manzano por lo que es incomprensible la actitud de cerrar el juzgado, aunque los inconformes como Rafael Valerio expresaron que piden apertura al diálogo del presidente para reabrir las instalaciones y buscar alternativas de trabajo para bien de su comunidad.