2012-11-16 | Puebla, Pue.- José Juan Marín Chagoya, acusado de asesinar a Isabel Doger Corte en el interior de su domicilio en el año de 2004, podría obtener para finales de este mes la protección de la justicia federal, incluso, hasta su libertad,
luego de que su abogado interpuso el pasado mes de septiembre un amparo ante el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Sexto Circuito que está por resolverse para esas fechas.
luego de que su abogado interpuso el pasado mes de septiembre un amparo ante el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal del Sexto Circuito que está por resolverse para esas fechas.
Así lo dio a conocer en conferencia de prensa, Omar Alejandro Meneses Benítez, abogado defensor del presunto culpable, quien manifestó que el cuerpo colegiado que revisa el caso que está inscrito en el amparo número 362/2012, y el cual preside el magistrado José Manuel Vélez Barajas, podría emitir un fallo a favor de su cliente para finales de este mes de noviembre, aunque no descartó que también exista la posibilidad de que el resolutivo de los magistrados pueda darse a conocer hoy viernes.
Aunque reconoció que este caso ya había quedado prácticamente en el olvido por parte de las autoridades de justicia, y de la sociedad misma, Meneses Benítez aseguró que aún está vigente, tras argumentar que su cliente ha sido víctima de la injusticia todo este tiempo al ser un "chivo expiatorio", luego de que las investigaciones que desde entonces y a la fecha realizó la Procuraduría General de Justicia, no fueron las adecuadas y terminaron por acusar a José Juan tan sólo por ser vecino de la víctima.
"Al menos hay tres elementos esenciales que usó la PGJ para acusar a José Juan de este crimen: el primero de ellos tiene que ver con una paja que tenía manchas hemáticas, y que según las pruebas periciales habían demostrado que se trataba de la sangre de la víctima, misma que fue hallada en la bota del pie izquierdo de mi cliente, pero que los agentes encargados de las investigaciones, nunca precisaron cómo había llegado esa evidencia al calzado del acusado".
Otra prueba que aseguró el litigante usaron en contra de quien fue también ex agente ministerial, fue un cabello que encontraron en la escena del crimen, y que según las pruebas practicadas a dicha evidencia, arrojaron que el ADN obtenido de esa partícula de cabello correspondía al ADN de su cliente; aunque un peritaje externo demostró que ese cabello no pertenecía ni siquiera a otro de los sospechosos de la muerte de esa mujer y que se trató del yerno de la víctima, "entonces fue cuando se supo que había una tercera persona, pero de la cual nunca más se supo nada, vaya ya ni siquiera se siguió una tercera línea de investigación", dijo el abogado.
Por último, Omar Alejandro Meneses Benítez, argumentó que la PGJ usó para culpar a su cliente, algunas de las lesiones que presentaba en el cuerpo al momento de ser detenido, y las cuales dijeron que habían sido causadas durante un posible forcejeo que sostuvo con su víctima antes de terminar con su vida.
Todas esas pruebas que en su momento argumentó la autoridad estatal para inculpar a su cliente, dijo el abogado, han sido claramente erróneas y ya se presentaron las pruebas contundentes a la justicia federal para echarlas abajo y dejar en libertad a José Juan Marín Chagoya.
Además, mencionó que a ocho años de ese artero crimen, la PGJ no ha logrado establecer un verdadero móvil, pues señaló que en un principio se tenía la teoría de un robo; sin embargo, y semanas después, los agentes que llevaron a cabo las investigaciones en ese tiempo, recuperaron en la misma casa de la víctima los objetos de valor que se presumió habían sido motivo del cruel asesinato, entre ellos estaban varias monedas centenarios y dólares americanos que la víctima guardaba en su casa.
De lo anterior, Meneses Benítez manifestó en rueda de prensa que, en su muy particular punto de vista, el homicidio de esta mujer pudo ser por un conflicto pasional y no por un robo, pues recordó la saña con la que privaron de la vida a esta mujer, donde dijo que no se debe olvidar que la atacaron salvajemente con más de 40 heridas en el vientre hechas con un arma punzocortante, además de los severos golpes en cabeza y rostro, pero también estaba el hecho de que eran visibles varios hematomas en brazos y piernas que inducen a que ella fue torturada previamente a su asesinato.
Por lo anterior, Omar Alejandro Meneses Benítez confió en que la justicia federal proteja a su cliente y falle a favor de él, tras considerar que ha sido injustamente acusado de un crimen que no cometió y por el cual un juez penal en Puebla lo sentenció, primero a 56 años de cárcel, y después le quitó seis años para dejarle su condena a 50 años de prisión, siendo que lleva ya ocho años encerrado desde que se cometió ese atroz crimen y pide justicia para José Juan, como también dijo, debe haber justicia para la familia de la víctima, y que no los sigan engañando con presuntos culpables.
