Homicidio


“La Ogresa” de La Roma

1940 | Ciudad de México.- La señora Felícitas Sánchez Aguillón, algunos decían que su segundo apellido era “Neyra”, nacida durante la década de los 1900´s, estudió enfermería y comenzó a trabajar de partera en su natal Veracruz. Desde su infancia mantuvo una relación tormentosa con su madre, quien la rechazaba y le provocó en su pequeña hija un desprecio hacia la maternidad y todo lo relacionado con ella y alimentó en ella un sentimiento perverso, megalómano que se expresó con crueldad hacia los animales, envenenando perros y gatos callejeros. 

Una personalidad neurótica que alimentó su actividad que le resultó atractiva y disfrutaba hacerlo. Luego manteniendo una relación amorosa con Carlos Conde un hombre de poco carácter, dependiente y sumiso –un patrón que repetiría en sus futuras parejas.

Felícitas era una mujer obesa, de malos modales, misántropa y de carácter muy fuerte, sus ojos de mirada astuta y perversa, le daban una presencia impositiva y siniestra. No tenía un pelo de tonta; muy al contrario, era una partera de gran prestigio, su actividad era solicitada por innumerables “clientas” de todas las clases sociales.

En el año de 1910 Felícitas, tras su separación de su esposo, se trasladó a la Ciudad de México en donde rentó una habitación a una mujer que ocupaba un departamento en calle Salamanca No. 9, en aquella época ocupado por un edificio de departamentos. Su casera y compañera de departamento laboraba todo el día y solo iba utilizaba el departamento para pernoctar, lo cual dejaba a Felícitas el tiempo y el espacio para darle riendas sueltas a su aberrante oficio.


Felícitas estableció así su negocio en el lugar "atendiendo partos", a la casera no le molestaba mientras el sitio estuviera limpio. El negocio comenzó a destacar y en especial cuando mujeres adineradas acudían a consulta con la mujer. Evento por lo más extraño, porque era extraño que una mujer con alta capacidad adquisitiva atender su embarazo con una partera en un barrio marginal.



Pronto el negocio prosperó, Felícitas siguió practicando abortos clandestinos, incluso realizó visitas a domicilio. La mujer frecuentó los más selectos barrios de la ciudad. Atendió a las mujeres practicando su oficio sin importar la edad gestacional del embarazo, inclusive en plena labor de parto. Antes de comenzar con su faceta como asesina serial, la partera se dedicó al tráfico de menores: 

Empezó a vender a los niños recién nacidos que sobrevivían o le encargaban, pronto empezó a traficar también con niños que adquiría de madres que por alguna razón le entregaban a sus hijos, bajo la promesa de que los colocaría en una "buena" casa. Durante la década de 1910's, todavía en el período del México porfirista, la partera fue detenida en por lo menos en dos ocasiones por tratar de vender a un bebé; la mujer salió libre tras pagar una simple multa.





















Los vecinos pronto empezaron a percatarse de eventos extraños: El drenaje del edificio se tapaba con frecuencia, sin embargo para arreglar este contratiempo Felícitas contaba con la complicidad de su plomero “de confianza”, Salvador Martínez Nieves. En otras los vecinos podían percatarse de un extraño humo negro y pestilente que salía del departamento.
No pasó mucho tiempo para que Felícitas evolucionara de la práctica de abortos al asesinato; los niños que no lograba vender terminaban muertos sin mencionar que muchos infantes murieron bajo su cuidado. La macabra asesina pronto recaudó dinero suficiente para montar un negocio, abrió una tienda de abarrotes que también fungió como clínica clandestina, ubicada en la calle Guadalajara No. 69, en la Ciudad de México, a la cual llamó "La Quebrada".
El 8 de abril de 1941, la alcantarilla del edificio de Salamanca donde vivía la partera se tapó, se encontraba congestionada desde la toma domiciliaria. En el primer piso del edificio se disponía una tienda de abarrotes, el dueño, llamado Francisco Páez, mandó a llamar a un plomero y a un par de albañiles. Los albañiles levantaron el piso del negocio para poder acceder a la cloaca, cuando llegaron a ella la sorpresa y las náuseas fueron generales. El drenaje se encontraba atascado por un enorme tapón de carne putrefacta, gasas y algodones ensangrentados, que despedían un olor nauseabundo. Indagando en la repugnante masa se encontraron con algo que despejó todas las dudas, entre ellos un pequeño cráneo humano.
Rápidamente, la prensa y la policía se hicieron presentes. Las autoridades llamaron a la puerta de la la casera que no sabía nada y compartía su departamento con la siniestra mujer. Los dejó pasar hasta la habitación de su inquilina, a la cual ella nunca había entrado. Lo primero que resaltó a vista dentro del cuarto, fue un altar con velas, agujas, ropa de bebé, un cráneo humano y una gran cantidad de fotografías de niños a manera de trofeos, que según los expertos, determinaron que era un comportamiento típico de los asesinos seriales, puesto que coleccionan fetiches que se relacionan con su víctima. Tras ese hallazgo, las autoridades determinaron catear "La Quebrada", sin la presencia de Felicitas que tras el escándalo se había dado a la fuga.
Aunque en esa época no existía la noción del asesino en serie, el infanticidio ya era considerado un crimen altamente condenado. La investigación cayó en manos del detective José Acosta Suárez.

El señor Acosta era un hombre práctico y poco impresionable, dedicado a su trabajo, quien en breve tiempo logró recopilar la información con ayuda de un niño de 14 años que había fungido como ayudante de Felícitas, lo que permitió su detención.

–Sí, sí, sí –dijo. Había ejercido su oficio como partera durante los últimos 15 años, siendo su especialidad los alumbramientos prematuros, unas veces por métodos abortivos y otras estrangulando a las criaturas tan pronto nacían. 

La prensa pronto dio rienda suelta a infinidad de historias de terror, en su mayoría basadas en hechos reales que involucraba a la siniestra mujer, a la que llamaron de diversas formas; "La Ogresa de la Roma", "la Trituradora de angelitos”, “la Descuartizadora de la Colonia Roma" o "la Espanta-cigüeñas" y habría sido responsable de infinidad de abortos y al menos medio centenar de infanticidios durante la década de 1930's en su mayoría para encubrir la honra de mujeres de “buena reputación”. Las notas periodísticas colocaron especial énfasis en su fealdad y basándose en el retrato que tenía de ella sus vecinos, influenciados en forma negativa por sus arteros crímenes afirmaban; "Parece bruja, con los ojos saltones, gorda, fea, más bien repugnante..." 
El marido de “La Ogresa”, Carlos Conde, de quien se había separado, confirmó que había procreado varios hijos, entre ellos; dos niñas gemelas que tan pronto nacieron fueron vendidas, pero otros alumbramientos varones no corrieron la misma suerte, porque fueron asesinados por su propia madre tan pronto nacieron. Carlos que ya no vivía junto a la diabólica mujer, llegó a conocer el oficio de su esposa y jamás la denunció. 
Los cómplices de "la Ogresa" relataron la terrible tortura a la que sometía a los bebés y niños: Solía parodiar los cuidados maternales de una manera sádica: Bañaba a las criaturas con agua helada, no les daba de comer durante largos períodos de tiempo, los dormía en el piso y a veces los alimentaba con carne o leche podrida.

Sus métodos de ejecución fueron variados: Asfixia, envenenamiento, apuñalamiento y hasta inmolación. Generalmente los estrangulaba o asfixiaba, repitiendo sus diversiones de su juventud. Tras ocurrir la muerte del infante procedía a descuartizarlo. Los testigos afirmaron que en ciertas ocasiones los llegó a descuartizar vivos; los restos, generalmente, los tiraba a las alcantarillas, a veces los desechaba en depósitos de basura y otras veces para deshacerse del indeseable producto los colocaba en el cómodo, los rociaba de gasolina y les prendía fuego para luego arrojar los restos carbonizados al boiler y finalmente las cenizas a la basura. Se dijo que la mujer habría quemado bebes aún vivos.
El 11 de abril de 1941 fue detenido Roberto Sánchez Salazar un cómplice. Que relató que en efecto sabía lo que estaba pasando, pero por miedo a ser condenado por complicidad no denunció el hecho a las autoridades. Ese mismo día Felícitas fue atrapada junto con su amante, Roberto o Alberto Covarrubias, alías "el Beto" o "el Güero" quien también fue su cómplice, Felícitas había procreado una hija, nacida en 1939, con quien trataban de huir de la ciudad.

La siniestra mujer confesó:
–Efectivamente, atendí muchas veces a mujeres que llegaban a mi casa... Me encargaba de las personas que requerían mis servicios y una vez que cumplía con mis trabajos de obstetricia, arrojaba los fetos al WC.
Pero el frágil estado mental de Felícitas iba más allá, tenía ideas delirantes en donde creía realmente que hacia un bien con sus atroces crímenes, esto la acercaba más al perfil de un asesino misionero, pero lo cierto es que su principal motivación siempre había sido monetaria, por lo que entraba más bien en la categoría de asesina hedonista, incluso les asignaba una cualidad mística, ejemplo de esto es el altar que fue encontrado en su habitación, conducta relacionada con los asesinos visionarios, como ella misma afirmó:
–Una mujer me dijo que había soñado que su hijo iba a nacer muy feo, que por favor le hiciera una operación para arrojarlo. En efecto, aquella criatura era un monstruo: tenía cara de animal, en lugar de ojos unas cuencas espantosas y en la cabeza una especie de cucurucho. A la hora de nacer, el niño no lloraba, sino bufaba. Le pedí al señor Roberto que lo echara al canal, y él le amarró un alambre al cuello.

Sus declaraciones reflejaron el terrible grado de cosificación que la homicida mantenía hacia sus víctimas, las repudiaba a tal grado que las visualizaba de esta manera.

El abogado defensor de Felícitas, tenía experiencia en asuntos difíciles, pero la mujer con sus declaraciones y la de los testigos, parecía hundirla cada día más, entonces debería encontrar una mejor línea de defensa, buscando entre otras estrategias la de locura.

"La Descuartizadora de la Roma" desde su detención hasta junio de 1941, alrededor de tres meses, fue recluida en prisión y aislada a causa del peligro que representaba para ella el contacto con la población general del reclusorio, tras el embate de la prensa. Durante todo ese tiempo vivió, irónicamente, una regresión, se comportaba como una niña pequeña, lloraba todo el día, sólo pronunciaba monosílabos y una repetitiva frase que en ocasiones llegaba a gritar: "Quiero irme de aquí.", incluso como típico berrinche infantil se tiraba al piso, pataleaba, gritaba y era necesario arrastrarla para trasladarla de un lugar a otro. Totalmente vestida de negro, con señales de gran agotamiento físico, en un estado cercano a la inconsciencia. Se le vio temblar, saltar, luchar con seres imaginarios, rodar agotada en el lecho. Los médicos de la Inspección prefirieron sedarla. Pasó varios días casi sin comer. Sólo quería dormir.
Las más fuertes pruebas de la fiscalía que conectaban a Felícitas con los cargos de asesinato eran los restos encontrados en la cañería de Salamanca No. 9, entre los que se encontraban un cráneo y un par de piernas que correspondían a un niño de por lo menos un año de edad. 

El abogado continuó la defensa y la búsqueda de algún artilugio legal, la mujer en semejante posición sería sentencia a 20 años de cárcel, la máxima pena que se aplicaba en aquella época. Sin embargo, el resultado de la sentencia fue distinto. El abogado había encontrado la mejor defensa y era el ataque.

Inexplicablemente los restos encontrados en la cañería y que eran la principal prueba, habían desaparecido y la partera asesina fue sentenciada el 26 de abril de 1941, por los cargos de aborto, inhumación ilegal de restos humanos, delitos contra la salud pública y responsabilidad clínica y médica; ninguno de estos crímenes era considerado como grave por lo que la mujer alcanzó fianza para recobrar su libertad.

Aunque la fiscalía aún contaba con los testimonios del plomero que estaba completamente dispuesto a declarar y del amante, quien bajo la presión adecuada terminó por dar a conocer lo que sabía, desafortunadamente el juez tercero de la Primera Corte Penal, licenciado Clemente Castellanos, abdicó, se cree que fue amenazado o sobornado para hacerlo, lo cual facilitó la salida de Felícitas antes de que la fiscalía pudiera apelar el fallo.

El mayor problema del escándalo no eran los infantes asesinados ni los abortos clandestinos practicados, sino que el abogado defensor había amenazado con publicar una larga lista de “clientas” que involucraba presumiblemente a poderosos políticos y funcionarios públicos.

Los periódicos publicaron una nota que causó revuelo: “'La Ogresa de la Colonia Roma' denunciará a todas las señoras que fueron a solicitarla”. Felícitas ingresó en prisión el 26 de abril de 1941 por los delitos de asociación delictuosa, aborto, violación a las leyes de inhumación y responsabilidad clínica y médica.

En el expediente aparece un trozo de hoja papel bond, escrito a mano con tinta sepia, y fechado el 26 de abril, en el que sólo alcanza a leerse: “Puede quedarse la niña de la reclusa Felícitas Sánchez para remitirla al kínder el lunes próximo”. En un oficio fechado el 1º de mayo de 1941, se asienta, sorprendentemente, que el Juez Tercero de la Primera Sala Penal se declara incompetente para seguir llevando el proceso. En el documento siguiente, fechado el 10 de mayo, el juez octavo determina dejar a la partera en libertad bajo fianza, mediante el pago de $600.00 pesos. “¡La descuartizadora saldrá en libertad!”, clamaron los medios al conocer la resolución.

Los abogados de Felícitas se habían aprovechado de vacíos legales “para exigir que se comprobara el cuerpo de sus delitos”. Pero el cuerpo de sus delitos no estaba en ningún lado: habían desaparecido “las piernitas de niño”, no había acusaciones, todo se fundaba en dichos.
El exesposo, Carlos Conde, a pesar de todo, incluso a pesar de que Felícitas ya mantuviera otra relación sentimental, fue quien pagó dicha fianza, lo que evidenciaba una relación enfermiza entre ambos. El monto de la fianza fue fijada en $600.00 pesos y en junio de 1941 la asesina quedó libre.

No obstante que la homicida recobró su libertad y había burlado la ley, su vida se convirtió en un infierno, puesto que la opinión pública se había encargado de señalarla y finalmente la prensa informó que el 16 de junio de 1941, Felícitas se suicidó con una sobredosis de Nembutal, durante la madrugada en la casa que ahora compartía con su concubino mientras éste dormía. La homicida habría dejado tres cartas póstumas: una dirigida a su ex-abogado, otra a su actual abogado y una última a su pareja. En ellas no había ninguna expresión sentimental, sin culpa, sin dolor, sin tristeza y sin lazos afectivos de ningún tipo, en ningún momento menciona a su hija. Al final de cuentas parecía haberse cosificado a sí misma, su propia muerte no pareció producirle ningún sentimiento.

Su hija pasó a la tutela del Estado, fue llevada a un hospicio, creció hasta convertirse, hasta donde se sabe, en un miembro "funcional" de la sociedad.

La homicida fue una mujer organizada, hedonista y sedentaria que según su profesión se considera un ángel de la muerte, se graduó como enfermera y ejerció como partera, aunque su hábito asesino causó tanto daño, las mujeres que abortaron sintieron aligerada su carga.

Se dijo que con la muerte de “La Ogresa” fue un asesinato premeditado y mandado a ejecutar por quien se sintió chantajeado durante el proceso legal. Sí así fue, un homicidio más quedó impune.

Palabra referida:
Ogresa.- En francés el término fue originalmente usado por Charles Perrault (1628-1703) en su compendio de cuentos Histoires ou Contes du temps Passé, más conocido por su subtítulo Contes de ma mère l'Oye. En este libro de Perrault, publicado en 1697, aparece el primer ejemplo de ogro hembra (como «ogresa») en uno de los cuentos del libro: La Bella Durmiente, que Perrault había escrito basándose en un cuento del napolitano Basile. En 1698, un año después de la publicación del libro de Perrault, la Condesa de Aulnoy, Marie-Catherine Jumelle de Berneville (1650-1705), retomó el término ogre en su cuento L'Oranger et l'Abeille. A partir de la publicación de los cuentos de Perrault y de Madame de Aulnoy, el personaje del ogro se fue popularizando progresivamente, apareciendo cada vez más en otros cuentos de hadas.

Fuentes consultadas:
Lazo, Norma (2007) (en español). Sin clemencia. Inglés (1ª edición). México: Random House. ISBN 0-307-39173-6 / 978-0-307-39173-5.
Información y recopilación de Rodolfo Herrera Charolet, publicada en el periódico electrónico Eprensa.Info, el 21 de diciembre de 2012.
Con información publicada en La Prensa; 9 y 29 de abril, 17 de junio de 1941.



Cholula | Abril 2013


Asalto a comercio


Ejercen acción penal contra dos personas detenidas por robo
2013-04-30 | La Procuraduría General de Justicia (PGJ) informa que la Fiscalía General Metropolitana, a través de la Dirección de agencias del ministerio público metropolitana norte, ejercitó acción penal en contra de dos personas que enfrentan cargos por el delito de robo.


José Raúl González Sevilla, fue detenido en la junta auxiliar San Felipe Hueyotlipan luego de que presuntamente asaltó una farmacia ubicada sobre la calle Josefa Ortiz de Domínguez.


De acuerdo con la denuncia, el indiciado ingresó al establecimiento comercial y aprovechó un descuido de la encargada para abrir la caja registradora y extraer dinero en efectivo.

Al percatarse del ilícito, el personal solicitó auxilio por lo que elementos de la Policía Municipal arribaron a la zona e iniciaron la búsqueda del presunto asaltante quien calles adelante fue identificado y detenido, en posesión del dinero.

Con base en las diligencias desahogadas por el ministerio público adscrito a la Dirección de agencias metropolitana norte, José Raúl González Sevilla fue consignado al Juez penal correspondiente, bajo la averiguación previa 1113/2013/7APUE.

En otra acción, la referida Dirección también ejercitó acción penal en contra de Rolando Mendoza López, de 23 años de edad, quien fue detenido por personal de seguridad de Sam´s Club sucursal CAPU, cuando extraía ilícitamente mercancía diversa.

Según el señalamiento de los custodios, el probable responsable fue sorprendido a la salida del establecimiento en posesión de un carrito repleto de artículos diversos los cuales no pagó, por lo que fue asegurado y luego entregado a la Policía Municipal.

A través de las pruebas reunidas por la representación social, Rolando Mendoza López fue puesto a disposición del Juez penal correspondiente bajo la averiguación previa 1581/2013/CENTRO.

Robo de autopartes


Investigan a sujetos presuntamente dedicados al robo de autopartes



2013-04-30 | La Procuraduría General de Justicia (PGJ) informa que la Fiscalía General Metropolitana, a través de la Dirección de agencias del ministerio público metropolitana sur, inició la averiguación previa 2445/2013/SUR, en contra de Ángel Julián Ortega Nieva y/o Isaías Bermúdez Ortega, Alberto de Jesús Reyna Ortega y/o Alberto Saúl ortega Reyna y Sergio Antonio Ramírez Prieto por el delito de robo, portación de instrumento prohibido y cohecho.

Alrededor de las 18:33 horas del 27 de abril del año en curso, elementos de la policía municipal sorprendieron a dichos sujetos en flagrancia delictiva robando autopartes a un vehículo Jetta, color blanco, el cual se encontraba estacionado sobre la avenida San Francisco  a la altura de la calle Rio Jamapa de la colonia San Manuel de esta ciudad capital.

Una vez que se percataron de la presencia de los uniformados, los ahora detenidos abordaron un automóvil marca Mitsubishi, tipo Lancer, modelo 2009, color gris, con placas de circulación del estado de Puebla e intentaron darse a la fuga siendo detenidos calles adelante.

Al efectuarles una revisión se les encontró entre sus pertenencias, dos cuchillos metálicos de 20 centímetros, dos ganchos metálicos conocidos como chorla o ganzúa, un desarmador; además en el interior del vehículo en el que viajaban fueron encontradas cuatro llaves tipo Allen de diferentes medidas, un desarmador de punta plana, un desarmador de punta de cruz, una pinza tipo mecánico de metal, dos llaves mecánicas de distintas medidas, una llave tipo “L”, una llave de cruz metálica, un gato hidráulico, 106 dados metálicos de diferentes medidas, tres gafas tipo industrial de plástico trasparente, dos lámparas leds de color rosa y verde, un par de guantes de tela, nueve tornillos, cinco rondanas, una tuerca, seis lapiceras, dos llaves para vehículo, una cinta de color negro, una llave metálica y una mochila marca Wilson.

Cabe señalar que al no poder acreditar la legítima procedencia y posesión de los objetos, y ante el indicio de su procedencia ilícita, los hoy detenidos ofrecieron a los oficiales la cantidad de 21 mil 750 pesos para obtener su libertad.

Los tres sujetos quienes presuntamente se dedican al robo de autopartes serán consignados en las próximas horas a la autoridad judicial correspondiente, en tanto se exhorta a posibles víctimas que pudieran reconocerlos a que acudan a denunciar a la Dirección de agencias del ministerio público metropolitana sur, ubicada en calle Tlaxcala No. 47 colonia San Rafel Oriente, Puebla, Pue.

Narcomenudeo


Consignarán a sujeto en posesión de droga
2013-04-30 | La Procuraduría General de Justicia (PGJ) informa que la Fiscalía General Metropolitana, a través de la Dirección de agencias del ministerio público metropolitana sur, inició la averiguación previa 202/2013/DMSZ, en contra de José Juan Flores Téllez  quien enfrenta cargos por delitos contra la salud.

Dicho sujeto fue asegurado por elementos de la Policía Estatal en inmediaciones de la colonia Artículo Primero de la junta auxiliar de Santo Tomás Chautla,
en posesión de una bolsa negra de plástico en cuyo interior se encontraban  84 envoltorios de papel de hierba verde con características propias de la marihuana, así como 17 bolsas de plástico con características propias de cocaína en piedra, además una cigarrera metálica de color negro con blanco  que contenía 21 bolsas de plástico con polvo blanco al parecer cocaína.

Cabe señalar que al ser cuestionado el hoy detenido confesó dedicarse a la compra venta de dichos estupefacientes, el cual era distribuido en diferentes puntos de dicha junta auxiliar.

Por estos hechos José Juan Flores Téllez  fue puesto a disposición del agente del Ministerio Público, por su probable responsabilidad en delitos contra la salud y en las próximas horas será consignado a la autoridad judicial correspondiente.  

Robo de auto


Consignan a sujeto que enfrenta cargos por detentación de vehículo robado
2013-04-30 | La Procuraduría General de Justicia (PGJ) informa que la Fiscalía General Metropolitana, a través de la Dirección especializada en investigación de robo de vehículos, ejercitó acción penal en contra de Abel Ramírez Hernández y/o Eloy Abel Martínez Hernández, de 34 años de edad, quien fue detenido en flagrancia mientras trataba de desmantelar un automóvil robado. 

El 25 de abril del año en curso fue reportado el robo de una camioneta marca Nissan, línea Estaquitas modelo 2007 blanca con placas de circulación del estado  de Querétar
o y propiedad de una empresa dedicada a la venta de radiadores. El ilícito ocurrió sobre la calle 2 poniente esquina con la 33 norte, de la colonia Amor.

De acuerdo con el reporte policial,  aproximadamente a las 21:00 horas el agraviado dejó estacionada dicha camioneta pero al regresar después de unas horas  se percató que ésta ya no se encontraba, por lo que dio parte a las autoridades quienes de inmediato iniciaron un operativo para tratar de hallarla. 

Luego de una intensa búsqueda, uniformados de la Policía Municipal ubicaron la unidad robada en las calles  9A norte y 102 poniente de la colonia Villa Frontera. En el lugar del hallazgo se encontraban dos hombres tratando de quitar los neumáticos a la unidad  por lo que los policías se acercaron a cuestionar a los sujetos sobre la procedencia de la misma.

 Una  vez  que la pareja se percató de la presencia de los uniformados, intentó darse a la fuga, sin embargo Abel Ramírez Hernández y/o Eloy Abel Martínez Hernández fue asegurado calles adelante mientras que su acompañante logró escapar. 

Por lo anterior el ahora detenido fue puesto a disposición del ministerio público especializado en investigación de robo de vehículos, autoridad que abrió la averiguación previa  1449/ 2013/RVPUE mediante la cual desahogó diversas indagatorias y diligencias que permitieron documentar la responsabilidad del sujeto en el ilícito. 

Con base en las pruebas reunidas por el representante social, Abel Ramírez Hernández y/o Eloy Abel Martínez Hernández fue consignado al Juez cuarto penal bajo cargos por el delito de detentación de vehículo robado.

Gobierno festeja a niños cholultecas


Desfile con motivo del día del niño
2013-05-05 | Con un desfile multicolor de carros alegóricos, payasos, magos y el espectáculo internacional “El Mundo de la Fantasía”, la alcaldesa Dolores Parra Jiménez encabezó la celebración múltiple del Día del Niño, al que acudieron más de tres mil infantes acompañados de padres y familiares.

El misterio del Tesoro


El tesoro del “Vita”

El misterio de la existencia de un valioso cargamento en el yate ibero “Vita”, del que se contaban fabulosas historias, fue revelado a principios de los 1940´s por el general Juan Merino Segura, quien entabló una demanda por defraudación fiscal por 200 millones de pesos.
Construido en 1931 en Kiel (Alemania) por la firma Germania Werft GmbH, con el nombre de "Argosy", se trataba de un yate de propulsión diésel con una eslora máxima de 62,20 m, por 9,20 de manga.
Fue vendido a un ciudadano filipino, navegando bajo pabellón estadounidense. En 1934 cambió su nombre al de "Vita".

A fines de 1938, Marino Gamboa, uno de los tantos hombres de paja utilizados por Juan Negrín, entonces Presidente del Consejo de Ministros de España, adquirió el buque y le puso el nombre de Vita.

El "Vita" se hallaba de vacaciones en Holanda en febrero de 1939, cuando Marino de Gamboa recibió una orden de Juan Negrín, último jefe de gobierno de la Segunda República Española para fletar la embarcación. Gamboa llevó el "Vita" al puerto británico de Southampton para cerrar el contrato y de allí parte al puerto francés de El Havre, dejando allí el "Vita" a disposición de las autoridades españolas republicanas.

Carga del tesoro
Al terminar la guerra los dirigentes del Frente Popular se pusieron a salvo, sin atender a los miles de izquierdistas, muchos de ellos implicados en crímenes brutales, que quedarían a merced de sus enemigos. Así que los dirigentes, a salvo lograron acumular un inmenso tesoro, cuya venta serviría para controlar políticamente el exilio, a cuyo fin se formó el SERE (Servicio de Evacuación de Republicanos Españoles).
Negrín, "previsoramente", como él decía, organizó desde los primeros meses de la contienda el gigantesco despojo. Y el 28 de febrero de 1939 embarcó en el puerto francés de El Havre las 120 maletas que contenían los objetos incautados por la Caja General de Reparaciones durante la Guerra Civil Española y otros de diversa procedencia,  llevando un grupo de carabineros españoles leales a Negrín, dirigidos por el capitán Enrique Puente, capitán relacionado con los separatistas vascos, con órdenes de anclar en el puerto de Veracruz, México. Su carga debía recibirla el doctor Puche, ex rector de la universidad de Valencia y agente de Negrín en México. Pero tanto el PNV como Prieto intentaron apoderarse de él. El botín valía la pena: depósitos del banco de España, cajas de oro amonedado, objetos históricos de la catedral de Tortosa, el Tesoro Mayor y Relicario Mayor de Santa Cinta, ropas y objetos procedentes de la catedral de Toledo, entre ellos el famoso manto de las 50,000 perlas, colecciones de monedas de alto valor numismático, con ejemplares únicos de valor histórico, objetos de culto de la Capilla Real de Madrid, entre ellos, el joyero y el Clavo de Cristo, pinturas, alhajas de los montes de piedad. La mayor parte de la carga, de contenido ignorado, iba en más de cien grandes maletas, que, nos informa el dirigente de la UGT Amaro del Rosal, habían adquirido en París con gran sigilo unos empleados del Banco de España, socialistas de confianza.

El tesoro en México
El Vita llegó a Veracruz el 28 de marzo. En dicho puerto debía esperar la llegada del "Vita" el delegado oficial de Negrín en México, el doctor José Puche Álvarez, no estaba presente para recibir la carga. Sin embargo el 17 de marzo el "Vita" había hecho escala en la isla caribeña de Saint Thomas y allí Enrique Puente telegrafió a Negrín para preguntarle a quién debía entregarse la carga del "Vita", pero Puente jamás obtuvo respuesta.

Así, ante la urgencia de descargar el fabuloso tesoro, con valor estimado en 300 millones de dólares, producto de donaciones de bancos, la iglesia y donaciones particulares a la llegada al poder español del general Franco;  el capitán Puente telegrafió al embajador de la República Española en México y líder socialista Indalecio Prieto. Prieto quien a su vez contactó con el entonces presidente de México, Lázaro Cárdenas y lo convenció que, como embajador tiene derecho a asumir la responsabilidad por la carga del "Vita" y controlarla. Así su cargamento se descargó en el puerto de Tampico y posteriormente fue trasladado a la Ciudad de México, bajo el control y la responsabilidad de la JARE (Junta de Auxilio a los Republicanos Españoles), la entidad de ayuda al exilio republicano dirigida por el mismo Indalecio Prieto, apartándolo así de manos negrinistas y comunistas y rivalizando con el SERE (Servicio de Evacuación de los Republicanos Españoles), la entidad de ayuda dirigida por Juan Negrín y sus aliados.

Prieto demostró más habilidad que sus competidores: de acuerdo con el presidente  Lázaro Cárdenas, burló a Negrín y al PNV y se apropió del barco. Luego se respaldó en la supuesta autoridad de las Cortes en el exilio, grupo de personas sin representatividad real, a quienes había sobornado con espléndidos giros, según explica Del Rosal. La maniobra produjo un duro cruce de correspondencia entre Prieto y Negrín. Con los fondos así obtenidos, Prieto montó la JARE que disputaría al SERE el control sobre los políticos exiliados, mediante pensiones más elevadas. Ambas organizaciones serían acusadas de corrupción y favoritismo. Amaro sospechó que los objetos de valor histórico o artístico fueron desguazados o fundidos para borrar la huella de su origen.

Los racistas jefes del PNV habían mostrado aversión a recibir ayuda de entidades españolas, pero, burlados en su plan de adueñarse del Vita, cambiaron de idea y trataron de "comer a dos carrillos", en expresión suya, beneficiándose tanto del SERE como de la JARE, pese a que cada organismo negaba su ayuda a quienes la recibieran del otro. Tendrían éxito sólo a medias. Los líderes nacionalistas catalanes habían defraudado sumas considerables al Frente Popular, aparte de lo que se quedaran de los saqueos anarquistas, quienes al parecer no había sufrido grandes penurias

De hecho el control del "Tesoro del Vita" fue un elemento decisivo de la disputa política y personal de Prieto y Negrín dentro del exilio republicano, precipitando la permanente ruptura de relaciones entre ambos líderes y alimentando las numerosas censuras contra Negrín que lanzaron líderes republicanos como Francisco Largo Caballero. Como el presidente mexicano Lázaro Cárdenas era amigo personal de Indalecio Prieto, por lo tanto no hubo interferencia alguna del gobierno de México en la administración hecha por los exiliados españoles.

Pocos dirigentes rehusaron las atenciones del SERE o de la JARE. Uno de esos pocos fue el ex presidente Alcalá-Zamora, víctima a su vez del robo de las cajas de seguridad de los bancos por el gobierno de Largo Caballero. Pese a soportar una dura necesidad, rechazó el dinero que consideraba manchado. Otro fue el insobornable Cipriano Mera, para quien "aceptar algo del SERE era reconocer tácitamente al nefasto doctor Negrín como representante oficial de los españoles exiliados". Mera, sufriendo pésimas condiciones en un campo de presos en Argelia, replicó a las ofertas de un enviado del SERE: "Mi caso no es diferente del de varios miles de refugiados. Ni más ni menos. Rechazo por adelantado cualquier privilegio personal, pues no me lo admite mi dignidad. Y ahora quiero decirte una cosa: estáis manejando un tesoro que no os pertenece y del que tendréis que rendir cuentas el día de mañana. ¡No lo olvidéis!". Nunca hubo rendición de cuentas, ni antes ni después de la Transición.

En enero de 1941, el presidente mexicano Manuel Ávila Camacho, sucesor de Cárdenas, ordenó que México asumiera el control de la JARE después de que salieran a la luz diversas irregularidades, como la fundición de monedas de oro de gran valor numismático, aunque no pudo realizarse ninguna auditoría por falta de documentación oficial.
La principal fuente a tal respecto, el propio Amaro del Rosal escribía:
"...A estas alturas resulta ineludible la pregunta clave que deben hacerse los españoles: ¿Qué fue de todo aquello? Están por explicar los paraderos, el empleo que se dio al oro, a la plata, a los valores y a las joyas y, sobre todo, debe aclararse qué se hizo con los objetos de arte», para concluir: «Mucho nos tememos que una gestión irresponsable convirtiera en lingotes de oro o plata aquellas colecciones numismáticas de valor incalculable y que se hiciera lo mismo con los objetos religiosos...."
Así el famoso tesoro desapareció un día, en donde uno de los principales implicados fue don Indalecio Prieto y el general José Manuel Nuñez, ex inspector de la policía y ex jefe de ayudantes del ex presidente Lázaro Cárdenas del Río, quien fungió como jefe de la escolta federal que supervisó el desembarco en Tampico y la conducción de la valiosa carga dentro del furgón 1065 de Ferrocarriles Nacionales, hacia la ciudad de México.

A pesar de la demanda establecida y del intento por esclarecer la introducción a territorio nacional de bienes de origen español, entre algunos de los refugiados privaba la indignación. Los dirigentes de la fundación México-España, Antonio Vargas y Julio Luelmo, declararon que don Indalecio Prieto si había desembarcado en el “Vita” y había introducido las maletas del valioso cargamento, aun cuando no se pagaron los derechos por tratarse de un gesto humanitario del gobierno mexicano de utilizar esa riqueza en beneficio de los refugiados españoles, que se había librado de los campos de concentración europeos. Sin embargo había pasado 20 meses y no se había apoyado a un solo inmigrante, lo que motivó la demanda para incautar ese tesoro y todos aquellos bienes controlados por don Indalecio Prieto.

Días después Prieto respondió a los señalamientos:
Mi deber es callar. No es de extrañar, que un hombre como yo tenga que arriesgar la reputación y la vida misma en nombre de los muy altos intereses, que en esta ocasión me imposibilitan para la defensa personal, que por lo demás no he buscado. El tiempo de hablar llegará… conozco perfectamente la intención y el alcance de esta campaña, y no haré el juego a los interesados con declaraciones que pudieran ser imprudentes y lastimar la actitud recta del gobierno que nos ha dado generosa acogida o lesionar los intereses de los españoles residentes.
Por otra parte, en la aduana de Tampico no existía expediente alguno sobre la entrada del “Vita”, ya que todas las órdenes fueron dadas verbalmente por el general Núñez, obedeciendo al expresidente Lázaro Cárdenas.

En un comunicado fechado el 25 de abril de 1941, la Procuraduría declaraba que “no hay delito que perseguir” afirmando que “la acción penal prescribió el 7 de julio de 1940. Actualmente el “Vita” se llama “Abril” y los tripulantes están tramitando su naturalización”.

Sin embargo las declaraciones no dejaron contentos a los refugiados españoles, por lo que a finales de 1942, siguieron exigiendo la renuncia de Indalecio Prieto a la Junta de Ayuda a Refugiados Españoles (JARE) y las cuentas claras con respecto a los tesoros de “El Vita”. Ante la problemática el gobierno mexicano intervino limitando las actividades del líder y exigiendo que en el comité figuraran tres mexicanos. Como respuesta, Indalecio Prieto y miembros del JARE se ampararon contra los actos del Presidente de la República y de la Secretaría de Relaciones Exteriores; sin embargo, a pesar de ello, fue nombrado Santiago Flores como auditor para precisar cuáles eran los bienes de la JARE con la tarea específica de pagar los subsidios que se adeudaban a los refugiados.

En enero de 1943, los señores Felix F. Palavicini y Luis Sánchez Pontón, directivos de la Comisión Administradora del Fondo de Auxilio para los Refugiados Españoles, declararon:
…Que el comité no estaba en posibilidades de obtener, con exactitud numérica, la verdad sobre los fondos que durante tres años retuvo en su poder la JARE; puesto que del total de ellos, a México vino la menor cantidad, quedándose la mayoría de los recursos en Rusia, Inglaterra y Francia, de donde no se les permitía la salida.

Se hizo un recuento de las inversiones de la JARE, concluyendo que la mayoría de los proyectos se debieron de haber destinado al apoyo de los refugiados para establecer empresas fuera de las concentraciones urbanas, mediante proyectos agroindustriales; siendo que por el contrario, casi la totalidad de los refugiados, alrededor de 13 mil personas, en su mayoría profesionistas se hallaban concentrados en el Distrito Federal.

Respecto al Servicio de Evacuación de los Refugiados Españoles (SERE), organismo que manejaba el grupo del doctor Juan Negrín, encabezado por José Puché, sus recursos que eran de ocho o nueve millones de pesos se encontraban agotados.

La inconformidad entre los refugiados españoles continuaba a pesar de que los informes había sido difundidos ampliamente, sosteniendo que Indalecio Prieto habría negociado buena parte del tesoro del “Vita” en Nueva York y, ya en dólares, lo envió a Chile, en donde supuestamente se encontraba.

Inventario del tesoro del “Vita”

Aun cuando el valor de los bienes transportados en el Vita nunca ha podido ser determinado. Mientras que Negrín estimaba oficialmente su valor en 40 millones de dólares, algunos lo elevaban a 300. Su venta durante la Guerra Mundial rindió únicamente entre ocho y diez millones de dólares, menos de la cuarta parte de lo tasado por Negrín.

El socialista Amaro del Rosal, único presidente de la Caja de Reparaciones y principal fuente al respecto, reproduce el siguiente inventario:

·         Bultos del 1 al 10. Objetos entregados por la Caja de reparaciones.
·         11 Depósitos Banco de España de gran valor.
·         12 Monte de Piedad de Madrid. 2 Gran valor.
·         13 Monte de Piedad y Depósito Banco de España.
·         14 Monte de Piedad y Depósito Banco de España, de gran valor.
·         15 Depósitos Banco de España.
·         16 Depósitos y una custodia de gran valor.
·         17 Depósitos Banco de España.
·         18 Depósitos Banco de España y una custodia Caja de Reparaciones.
·         19 Depósitos Banco de España y especial de Caja de Reparaciones.
·         20 Depósitos Banco de España y una custodia de Caja de Reparaciones.
·         21 Depósitos Banco de España y dos custodias Caja de Reparaciones.
·         22 Depósitos Banco de España y una custodia Caja de Reparaciones.
·         23 Depósitos Banco de España.
·         24 Depósitos Banco de España y una custodia de la Caja de Reparaciones.
·         25 Objetos religiosos Caja de Reparaciones de excepcional interés.
·         26 Depósitos Alicante.
·         27 Depósitos Banco de España.
·         28 Depósitos Bancos de España y objetos religiosos Caja de Reparaciones.
·         29 Depósitos Bancos de España y dos custodias Caja de Reparaciones.
·         30 Depósitos Banco de España y Castellón.
·         31 Depósitos Banco de España.
·         32 Depósitos Banco de España y entregas al Ministerio de Hacienda, de gran valor.
·         33 Depósitos Banco de España y entregas al Ministerio de Hacienda.
·         34 Depósitos Banco de España.
·         35 Depósitos Banco de España y entregas Ministerio de Hacienda.
·         36 Depósito.
·         37 Objetos varios.
·         38 Cajón entrega Generalidad Cataluña oro amonedado.
·         39 Depósitos de Bancos y reliquias del Patrimonio Real. Todo el joyero de Capilla Real. El célebre Clavo de Cristo.
·         40 Depósitos Monte de Piedad.
·         41 Depósitos Banco de España y custodia.
·         42 Depósitos Banco de España y lingotes oro.
·         43 Depósitos Banco de España y lingotes oro.
·         44 Depósitos Banco de España, y objetos históricos Catedral Tortosa.
·         45 Depósitos Banco de España y objetos históricos Catedral Tortosa. Objetos religiosos y ropa de gran valor artístico e intrínseco.
·         47 Objetos religiosos de gran valor artístico e intrínseco.
·         48 Entrega Generalidad de Cataluña. Objetos de gran valor.
·         49 Ropas y objetos religiosos procedentes de la Catedral de Toledo entre ellos el famoso Manto de las cincuenta mil perlas.
·         50 Ropa y objetos religiosos de Toledo. Depósitos del Monte de Piedad de Madrid y tres sobres de la Caja de Reparaciones conteniendo brillantes de alta calidad y de gran valor.
·         51 Depósitos Monte de Piedad de Madrid.
·         52 al 54 Depósitos Monte de Piedad de Madrid.
·         55 Depósitos Banco de España.
·         56 Depósitos Banco de España.
·         57 Una colección de relojes. Valor histórico y artístico.
·         58 Colecciones de monedas de oro de valor numismático. Ejemplares únicos de incalculable valor histórico.
·         59 Colecciones de monedas de oro de valor numismático. Ejemplares únicos de incalculable valor histórico.
·         60 a 80 Depósitos del Monte de Piedad y Banco de España. Más colecciones de monedas y otros objetos de alto valor. Ministerio de Hacienda.
·         81 Caja pequeña de madera conteniendo el monetario de la Casa de la Moneda de Madrid, de oro. Mucho valor.
·         82 al 84 Depósitos Banco de España.
·         85 al 87 Caja de Reparaciones. Objetos gran valor.
·         88 Depósitos Bancos y Monte de Piedad. 89 Entrega de la Generalidad y Monte de Piedad.
·         90 Entrega de la Generalidad y Monte de Piedad.
·         91 Depósitos Monte de Piedad. 92 Depósitos Monte de Piedad.
·         93 Depósitos Monte de Piedad.
·         94 Entregas de acuerdo con Decreto. En depósito.
·         95 Depósitos Generalidad y otros. 96 Entregas de acuerdo con Decreto.
·         97 Depósitos Monte de Piedad.
·         98 Depósitos Monte de Piedad.
·         99 Depósitos de la Generalidad y sacos con monedas de oro. (Sin revisar su valor numismático).
·         100 Varios bultos objetos de valor.
·         101 Objetos del Culto de la Capilla Real de Madrid.
·         102 Objetos del Culto de la Capilla Real de Madrid.
·         103 al 110 Depósitos Monte de Piedad.


Nota:
Fuentes Consultadas
MATEOS, Abdón (2009). La batalla de México. Final de la Guerra Civil y la ayuda a los refugiados, 1939-1945. Madrid: Alianza. ISBN 9788420682679.
OLAYA MORALES, Francisco, (2004a): El expolio de la República. De Negrín al Partido Socialista, con escala en Moscú: el robo del oro español y los bienes particulares. Barcelona, Belacqua. ISBN 84-95894-83-1.
OLAYA MORALES, Francisco,(2004b): La gran estafa de la guerra Civil: la historia del latrocinio socialista del patrimonio nacional y el abandono de los españoles en el exilio. Barcelona, Belacqua. ISBN 84-96326-09-8.
ROSAL, Amaro del, (1977): El Oro del Banco de España y la historia del Vita. Barcelona, Grijalbo. ISBN 84-253-0768-6.



Alfredo Héctor Donadieu alias “Adrián Dreesky” o “André Alfred de Villa” o “Henry Alfred Rey” o “Adrian Harles Delmont” o “Enrico Sampieto”; nació en el barrio de Andoume en Marsella, Francia, en febrero de 1900. Desde muy joven aprendió el oficio de expertos grabadores, mismo que le daría fama y dinero, además de muchos años en la cárcel.
Tras un largo historial delictivo y varias reclusiones en distintas cárceles logrando escapar de todas, incluyendo su reclusión en la “Isla del Diablo”, llegó a México gracias a un invitación de un español, madrileño, de nombre “Roberto”, radicado en México.
A sus 36 años, la trayectoria de su vida comprendía desde falsificaciones, contrabando de whisky, municiones, artículos varios hasta agente del espionaje en el Partido Fascista.
Con maquinaria comprada en Estados Unidos por “el amigo Roberto”, rápidamente se inició en México, con un grupo de colaboradores y amigos, el lucrativo negocio de la falsificación. Sampietro era un experto con el buril, así que los billetes falsos comenzaron a circular, eran de 20 dólares y su calidad era notable. La distribución se hacía en la isla de Cuba y en los Estados Unidos.
La policía, aunque enterada de las maniobras, no tenía pruebas ni verdaderas pistas para detener a los culpables, razón por la cual el detective Alfonso Farías, tomando el reto en sus manos, dedicó todo su esfuerzo para terminar con el grupo de Sampietro.
Un año después los colaboradores colombianos de Sampietro fueron aprehendidos, en uno de sus viajes a Cuba, meses después fue puesto en libertad y enviado a su país. Año y medio después, Farías aprehendió a “Roberto”, cabeza de la organización. Y si bien, por falta de pruebas fue puesto en libertad, por sus antecedentes lo deportaron de México.
Con la expulsión de “Roberto”, el mercado de los Estados Unidos se vino abajo, pues sólo él conocía a los compradores y no tuvo tiempo de dar la información antes de ser deportado. Unos meses después fue sustituido por Pepe, “El Gordo”, quien residía en la ciudad de Matamoros, Tamaulipas, en donde se dedicaba al contrabando. Esta relación duró poco tiempo, por la torpeza con la que operaban.
El falsificador Sampietro narra, en su libro de memorias, la manera en que se practicaba la prueba de legitimidad a los billetes de los Estados Unidos:
Por falta de entendimiento o acuerdo, unos hombres de “El Gordo” había hecho circular dólares falsos en una casa comercial. Quien había mandado a los Estados Unidos los billetes espurios, ya esta al tanto de que éstos era falsos, pues le fue comunicada una forma sencilla de averiguar la legitimidad de los dólares, la cual consistía en emplear la punta de un alfiler, con la cual, si el billete era legítimo, del papel moneda se desprendía hilitos de seda; de lo contrario, en los falsos impresos nada se sacaría con él…
Gracias al método de los hilitos, Farías pudo detener a varios cómplices de Sampietro, pero al escurridizo grabador no le llegaba su turno. Ante las dificultades y peligros que le representaba el papel que usaba, Sampietro mandó traer papel “legítimo” de Europa. Para entonces, el detective Farías era comandante de la Jefatura de Policía y continuaba tras de sus pasos. La persecución termino en 1937, cuando el comandante Farías, utilizando a un contacto con el que Sampietro había hecho negocios anteriormente, le tendió una trampa logrando apresar al falsificador, mientras éste caminaba por una calle en compañía de uno de sus lugartenientes.
No tenía en mi poder ya el material para la falsificación, pero había cometido un error de guardar los negativos de los billetes tras os respaldos de los asientos del desayunador. Farías me interrogó en forma legal e inteligente; comprendí que un cateo iba a ser practicado en mi alojamiento temiendo que los policías descubrieran los negativos y como allí vivía en compañía de una mujer y no cabía duda que al ser encontradas las pruebas de falsificación, mi compañera sería comprometida en un delito del cual era inocente, propuse al comandante Farías entregarle las pruebas suficientes para ser sentenciado a cambio de que mi amante no fuera molestada. El detective aceptó. Cumplí mi palabra y Alfonso Farías cumplió estrictamente la suya. Fui enviado a la penitenciaría bajo los cargos de falsificación y asociación delictuosa.
Al año de estar en prisión, entablé amistad con un grupo de fanáticos cristeros, dirigidos por el sacerdote José Aurelio Jiménez, quien cumplía una pena de 20 años de prisión por haber bendecido la pistola con la que Toral asesinara a Obregón.
El padre Jiménez era un hombre bajito, con lentes tras los cuales miraban tranquilos sus ojos miopes, de pelo lacio, trigueño y rechoncho. En el penal había acondicionado con tubos de cemento macetas pintadas de colores en donde sembraba rosas, buganvilias, geranios y verduras de varios tipos. A este espacio que se encontraba entre crujía y crujía, lo bautizó como Calzada de Cristo Rey, y por ahí acostumbraba pasear a la hora del Angelus. En el Penal era el director de aguas gaseosas: … vigilo las fórmulas, el colorido y la preparación de los jarabes, llevo los libros del negocio y gano 2.50 diarios, de los que me quitan el 30% para dármelo cuando salga de aquí.
El grupo de fanáticos hacía constantes reuniones en la celda del sacerdote, a las que era invitado Sampietro. En una de las reuniones el sacerdote propuso la fuga del falsificador, pues aducía que la falsificación le causaba un grave mal al Estado y todo lo que lo perjudique es beneficioso para nosotros. Para Sampietro recobrar la libertad era su más grande deseo, pro lo que la propuesta fue de inmediato aceptada, comprometiéndose a todo lo que le pidieron.
Como varios colaboradores pertenecían a la Liga de la Defensa o ex cristeros, Sampietro junto con Francisco Godoy Ibáñez, pasaron sin problema todas las puertas del penal, hasta quedar libres.
Estaba dispuesto a todo por cooperar con ellos, en primer lugar, por agradecimiento, y, en segundo, por simpatizarme. Me hice a la idea de que esta vez iba a delinquir por una causa que juzgaba buena y justa.
Durante varios años, Sampietro en compañía de los dirigentes de la Liga de la Defensa recorrió los principales puntos de reunión de los combativos grupos de “la causa de la fe”, mientras en Tampico se hacían circular entre 1944 y 1946, grandes cantidades de billetes falsos.
Cuando terminó el periodo presidencial del general Lázaro Cárdenas y subió al poder el presidente electo general Manuel Ávila Camacho, éste decretó un armisticio general para todos los levantados en armas; los dirigentes de la liga que comprendía la inutilidad de la lucha, no desperdiciaron la oportunidad que les brindaba el gobierno, y en su totalidad los diferentes grupos de guerrilleros se entregaros y salieron el libertad, poniendo fin a la insensata lucha armada.
Un año después empezaba la falsificación, en un país en el cual todas las falsificaciones, de la clase que fueran, hechas por mí o no, infaliblemente tendrían que imputármelas. Comprendí el peligro que me acechaba, sabía perfectamente que sólo huyendo de México podría salvarme, pero esto me era vedado por los mismos individuos que sin conocerlos había tenido confianza en ellos, estimándolos como hombres sinceros… que luchaban por sus ideales.
Los siguientes 10 años de su vida, Sampietro los dedicó completamente a la liga, viviendo totalmente recluido, con una vida monótona, sin diversiones ni distracciones.
En 1947, el subjefe de la policía bancaria era el señor Alfonso Farías. Y el jefe de la oficina de Prevención e Investigación de Falsificaciones, era el doctor Alfonso Quiroz Cuarón. Esta oficina fue crada en 1941, tras del fracaso de la Policía Judicial Federal para recapturar a Sampietro.
Ambos urdieron que el Banco de México ofreciera una recompensa de 10 mil pesos, a quien diera información sobre Enrico Sampietro. La codicia se despertó en Godoy Ibañez y, entonces, supieron que Sampietro lo había liberado “La causa de la fe”. Por lo que al poco tiempo, elementos de la Procuraduría de Justicia llegaron hasta el pueblo de Iztapalapa, presentándose en la casa de la presidente de una asociación religiosa, y donde vivía el que personificaba a Cristo en la representación de la pasión de semana santa. Lugar en donde había sido escondidos Sampietro y su mujer. Según versión de Quiroz Cuarón, los agentes llegaron cuando Sampietro se disponía a salir, vestido de militar del ejercito mexicano y le fueron recogidos varios fajos de billetes y solo musitó: “algún día tenía que suceder”.
En 1948, Sampietro fue recluido en una de las seis celdas circulares que tenía la penitenciaría de Lecumberri, quedando entre los presos aislados.
Durante los años de su reclusión, el doctor Quiroz Cuarón, consciente de las dotes artísticas de Sampietro, lo impulsó a realizar retratos y para motivarlo, consiguió que María Asúnsolo posara para él.
En una entrevista publicada en Revista de Revistas de fecha 3 de julio de 1974m, el doctor Quiroz Cuarón define la personalidad de los falsificadores:
El falsificador de especies valederas, es decir de cheques o billetes, es generalmente un artista fallido… Donadieu, mi amigo Enrico Sampietro, era un magnifico grabador desde muy joven. Su primer maestro fue un delincuente quien, conociendo sus aptitudes para el retoque y el dibujo, le enseñó las técnicas fotomecánicas para falsificar… Este tipo de falsificador necesita dominar una serie de técnicas. Por eso no abunda. No puede ser un débil mental… en el mundo no llegan a 80 los artistas.
Por otra parte, el falsificador tiene la mentalidad de un delincuente. Un hombre normal se disciplina a una vida regular y rutinaria; el delincuente no cree en los valores. Cree y quiere el dinero fácil; todo en la vida se conquista a base de esfuerzos, de preparación, de disciplina. El falsificador, además del afán del dinero fácil, tiene espíritu de aventura, le agrada la acción. Vive generalmente una existencia pobre en lo afectivo y en lo social. Por eso cambia tan fácilmente de compañera o de compañeros en el delito. Tampoco cree en la esperanza. Comete un delito, es descubierto, va a la cárcel; pero siempre piensa que el siguiente golpe va a salir bien, va a lograr cometer el delito perfecto. No llega a convencerse de que esto no es posible. Además no es nada previsor. El que trabaja, siempre trata de guardar algo para el futuro. El falsificador no. Simplemente no cree en esas cosas.

Sampietro cumplió su condena de 13 años en prisión y en 1961 fue expulsado del país.