Patrimonio histórico en renta

Particulares lucran con el patrimonio edificado
Los espacios que se rentan son San Pedro Museo de Arte, Instituto Cultural Poblano, el patio de la Casa de la Cultura, Museo Erasto Cortés, el antiguo convento de Santa Rosa

Alejandro Camacho Fierro / Foto Archivo Intolerancia

Empresas particulares prácticamente han tomado por asalto diferentes acervos culturales como museos para lucrar con el servicio, sin ninguna vigilancia, de bodas, quince años, bautizos o fiestas infantiles que ponen en riesgo el patrimonio edificado. Los espacios que se rentan son San Pedro Museo de Arte, Instituto Cultural Poblano, el patio de la Casa de la Cultura, Museo Erasto Cortes, el antiguo convento de Santa Rosa, Museo de la Revolución Mexicana, entre otros.

Un particular que se anuncia en un importante suplemento social, invita a los ciudadanos a rentar un edificio colonial para fiestas como bodas, quince años, bautizos, fiestas infantiles, graduaciones, convenciones y otros eventos masivos, con precios que van de los 4 mil hasta los 15 mil pesos por una o seis horas.
Hasta el momento, no hay una indicación por parte del gobierno del estado de Puebla para avalar la renta de espacios históricos que dieron a la capital poblana el título de Patrimonio Histórico de la Humanidad en 1988.
Ante ello, el investigador de la Universidad Autónoma de Puebla, Francisco Vélez Pliego, señaló que el problema no es la renta de espacios públicos e históricos para su lucro como salones de fiesta, sino que la mayor parte de los inmuebles ofertados para renta particular tienen una función primordial: resguardar acervos que pueden estar en riesgo con esas actividades sociales.
“El caso del tercer patio del edificio Carolino, que se renta como Real Carolino, tiene a un costado a la biblioteca La Fragua, que tiene una de las colecciones más importantes del estado y del país; dedicar esos espacios a este tipo de eventos genera condiciones ambientales que a corto o mediano plazo pueden afectar ese acervo.”
Lo más grave, aseguró, es que para este tipo de fiestas se improvisan cocinas para preparar alimentos, estructuras que pueden afectar al mismo inmueble, vibraciones por los aparatos de sonido o la presencia de un número importante de personas para lo cual el edificio no está preparado.
El investigador puso como ejemplo, el recién remodelado Museo Universitario Casa de los Muñecos, que ahora tiene un restaurante. “Y están el caso de San Javier, que tiene el archivo histórico del gobierno del estado; del Museo de Arte Virreinal de San Pedro”.
Criticó la poca transparencia que hay en los convenios que firma el gobierno del estado con los particulares que usufructúan con el patrimonio edificado, porque al parecer no se les está dando la protección debida. “Habría que revisar los convenios, hay una enorme ceguera cultural en el ámbito gubernamental para procesar dos requerimientos: la necesidad de recursos para mantener esos espacios, y la necesidad de generar espacios alternos de convivencia social.”
Por el contrario, el director de Arqueología de la delegación en Puebla del Instituto Nacional de Antropología e Historia, Eduardo Merlo Juárez, precisó que no es una actividad ilegal, sino que se trata de una práctica que tiene cada vez mayor actividad y se realiza incluso en lugares de la importancia del Palacio de Minería, donde frecuentemente hay eventos del gobierno de Marcelo Ebrard.
Sin embargo, Merlo reconoció que lugares, como la biblioteca Palafoxiana, podrían ser perjudicados por la vibración del ruido de las orquestas que amenizan las convivencias o por movimientos que pueden afectar el patrimonio.
Por ello, precisó que habrá que hacer una revisión a fondo para determinar si se está garantizando la seguridad de estos inmuebles y si las condiciones son óptimas para llevar a cabo eventos de este tipo.
Particulares lucran con el patrimonio edificado
Este negocio está a cargo de una particular llamada Irma Sánchez Merchant, quien hasta hace poco tuvo un suplemento quincenal de promoción turística en un conocido medio local y la cual, ofrece tarifas que van desde los 4 mil hasta los 15 mil pesos.
Por ejemplo, rentar para una boda el claustro del exconvento de Santa Rosa por cuatro horas cuesta casi 5 mil pesos; se debe dejar un “apartado” del 50 por ciento para poder seleccionar la fecha y la hora adecuada. Pero en realidad, “todos los detalles se tienen que tratar directamente con la señora”, dijo la voz que contestó cuando se marcó al teléfono 379 29 24, para pedir informes. Se tiene que hacer una cita con la señora Sánchez Merchant para que ella proporcione un “recorrido” por el edificio histórico seleccionado y llegar a un “arreglo”.
La persona que da informes en ese número telefónico aseguró que no hay ningún problema con el gobierno del estado por la renta de esos espacios, pues Andanzas, la empresa operadora de la renta del patrimonio edificado, “hizo un convenio” con las autoridades para realizar su negocio “sin ningún problema”. El servicio de meseros, de alimentos y de bebidas alcohólicas lo proporciona la misma empresa y se cobra aparte, pues es “especial” porque presuntamente protege los inmuebles, agregó la información.
Estos lugares los esperan para sus fiestas infantiles o bautizos Los lugares son San Pedro Museo de Arte, edificio del siglo XVI que también es conocido como el Museo Virreinal, y que tiene una capacidad para 900 personas; el Instituto Cultural Poblano (ICP), inmueble del siglo XVIII y que fue la antigua penitenciaria del estado, cuyo patio poligonal tiene capacidad para mil 350 personas. El patio de la Casa de la Cultura, también del siglo XVI y donde a un costado se encuentra la biblioteca Palafoxiana, tiene capacidad para 250 personas.
El patio principal del museo Erasto Cortes, una casona del siglo XVIII, con capacidad para 200 personas, y el patio Arcadas así como el claustro del Centro Cultural Santa Rosa, que fue el antiguo convento de Santa Rosa, con la misma capacidad.
Si usted no desea un espacio puede rentar también algunas salas: en la Casa de la Cultura la Luis Cabrera, con capacidad y 165 personas; la José Luis Alconedo, para cien personas; y con capacidad para 80 personas las salas José Manzo, Juan Cordero y Francisco Fabían y Fuero.
En el ICP están disponibles las salas Francisco Javier Clavijero y Manuel M. Flores, para albergar a 273 y 63 personas, respectivamente. También puede alquilar los auditorios del exconvento de Santa Rosa, del museo Interactivo Imagina, de San Pedro Museo de Arte y del museo de la Revolución Mexicana, mejor conocido como Casa de los Hermanos Serdán.
Si sus necesidades son otras, puede alquilar las áreas generales del museo Interactivo Imagina —arca, exteriores, existe y crea, descubre y crea, y el área temporal—, con capacidad para 20 personas; o bien, el estacionamiento del Centro Cultural Santa Rosa, con espacio para mil 500 personas.