Acusan a médicos del HUP de negligencia
2013-10-30 | Una mujer exige justicia contra los responsables del fallecimiento de su hija adolescente que fue atendida en el Hospital Universitario de Puebla (HUP), a donde la llevó por convulsiones y murió por causas diferentes que acusa ahí mismo se las generaron.
A esta redacción se presentó Maribel Calvario López, quien adelantó que las autoridades ministeriales están llevando a cabo las investigaciones correspondientes por posible homicidio, además de que acudirá ante Arbitraje Médico para presentar la queja por presunta negligencia médica.
La afectada narró que el pasado lunes 21 de los corrientes, alrededor de las 23 horas, llevó a su hija Dulce Ivón Sánchez Calvario, de 17 años de edad, al Hospital Universitario porque le dio una convulsión; la joven nunca había sufrido alguna enfermedad, pero al verla en malas condiciones, decidió llevarla directamente a ese lugar por la confianza de ser bien atendida.
Al llegar, aseguró que lo primero que le dijeron fue que si estaba segura que ahí la atendieran, esto por lo que tenía que pagar; por lo que ella les contestó afirmativamente y así comenzó a pagar cada estudio que le pedían, incluso tenía que estar buscando a la persona encargada de cobrar que regularmente no se encontraba en su lugar de trabajo; pero Maribel resaltó que llegó a pagar hasta un estudio que nunca le realizaron y era importante porque iba a ser de la cabeza. Aquí mostró su malestar porque si ella, ya había pagado, le condicionaron que la persona para hacer ese estudio llegaba hasta el día siguiente; por lo cual duda Calvario López del servicio, la calidad y el equipo tecnológico con que cuenta el nosocomio al que acudió pensando que tendrían todo a su alcance.
Ella gastó entre 15 y 17 mil pesos en estudios, medicamentos y hospitalización.
"Siento que cooperé en todo lo que ellos me pedían, incluso un paramédico me acompañaba para cerciorarse de que pagara lo que ellos me iban pidiendo", señaló.
Con el dolor aún encima, la mujer narró que escuchaba los gritos de desesperación de su hija cuando era atendida; asegurando que había muchas personas jóvenes, suponiendo que serían practicantes, y no expertos los que la estaban revisando. "No tenían por qué destrozarle su tórax, al momento de que le abrieron para entubarla", mencionó.
Dice que al no poderla atender correctamente, le pidieron que mejor la trasladara a otro hospital, pues ahí le iba a salir costoso; por lo que Maribel acudió al Hospital General del Norte donde le aceptaron el traslado. Sin embargo cuando regresa por su hija, tuvo que buscar dónde contratar una ambulancia, debido a que ahí ya no le brindaron mayor atención, ni a la paciente ni a los familiares.
La quejosa asegura que desde las 5 de la mañana del siguiente día, es decir el martes 22, dejaron de atender a su hija, supuestamente porque todavía debía dinero al hospital.
"Todo se resolvió cuando cambió de turno y al llegar otra trabajadora social, se realizó el trámite para una reducción del costo de lo que se estaba inicialmente cobrando, logrando depositar una cantidad muy mínima", abundó.
Finalmente pudo llevarse a su hija y al ingresar al HGN, la enfermera que los recibió les preguntó qué le había pasado a la chica, diciendo que sufrió convulsiones, pero al observar el pecho destrozado, le dijo que eso no tenía que haberle ocurrido, es en esos momentos cuando sufre un paro cardiorrespiratorio presuntamente porque también le habían perforado los pulmones y eso también provocó que con su propia sangre se ahogara.
"Hoy pido justicia y por eso estoy aquí, espero que se toquen el corazón las personas que saben de mi caso y me puedan ayudar para que se haga justicia contra ese hospital (HUP) porque hoy me tocó a mí, pero hay muchas personas que pudieran también llegar a sufrir lo mismo", puntualizó Calvario López.
2013-05-22 | Médicos del Hospital San Alejandro de esta ciudad, que están acusados del delito de negligencia médica que provocó la muerte de un bebé durante su alumbramiento, no se presentaron ante el Agente del Ministerio Público Especializado en Homicidios, tras ser citados por esa autoridad a un careo con la parte afectada.
Paola Rodríguez Roldán, de 20 años edad acudió la mañana de ayer martes ante las instancias correspondientes para sostener un careo con los médicos que la atendieron durante su parto en el Hospital San Alejandro, sin que ninguno de los citados se presentara.
El primero en ser llamado fue el ginecólogo que la observó durante varios meses en su embarazo, pero que según esto, el especialista no la atendió en el parto. A pesar de ello éste no se presentó a la hora, día y lugar fijados, por lo que las autoridades procederán a un segundo llamado de lo contrario podría recibir un apercibimiento por desacato.
La madre recordó que el pasado 3 de mayo inició sus labores de parto en dicho nosocomio, pero desde que empezó las labores, se presentaron al parecer diversos problemas, en los que de acuerdo a la primera versión, los médicos usaron fórceps para sacar a la criatura.
Después de que la joven madre se aliviara, los médicos le negaron ver a su hijo sin darle una explicación clara del por qué, siendo que hasta la mañana de un domingo fue cuando le mostraron al bebé, que según los doctores, se encontraba bajo cuidado intensivo, con respiración artificial, lo que implicaba que aún estaba con vida.
Sin embargo transcurrieron los minutos y las horas y los doctores no le daban razón a la madre de su hijo, hasta que fue informada de la noticia que lo habían perdido, pero sin mencionar la razón por la cual la criatura había muerto.
Tras la denuncia presentada por negligencia médica, los familiares de la madre y ella misma investigaron el caso, y fue como supieron más adelante que otra mujer que también se encontraba en labor de parto al momento de que la afectada estaba en la sala, supo que ya había problemas con el producto, y que según la testigo de referencia, que acompañó a la joven madre a la agencia del Ministerio Público, ratificó su declaración en la que aseguró que los doctores no supieron qué hacer para que todo saliera bien, pues había rumores de que la criatura estaba atorada en el vientre de su madre, y tuvieron que utilizar los fórceps, además de que no dudan que se les haya caído o algo similar, pues sí tenía algunos hematomas en su espalda.
Por esos hechos, se presentó la denuncia número 204/2013 en la Agencia Especializada en Homicidios y hasta el día de ahora, la familia de la joven madre no ha tenido respuesta alguna y exige que se haga justicia, pues todo parece indicar que, finalmente, una negligencia médica terminó con la vida de un recién nacido.
