Rodrigo Abdala Dartigues dejó su cargo como superdelegado de la Secretaría del Bienestar en Puebla luego de casi tres años, aunque no será recordado por proezas, sino por los fracasos y escándalos que protagonizó, como la vacunación VIP y la investigación de la Secretaría de la Función Pública por supuesto desvío de recursos para apoyar a Bertha Luján en la búsqueda de la dirigencia de Morena. Su lugar será ocupado por Vida Inés Vargas Cuanalo.
Después de semanas en los que se especulaba la salida de Rodrigo Abdala de la delegación del Bienestar, se confirmó la noticia y fue el mismo superdelegado quien informó que fue “promovido” como titular de la Unidad de Planeación y Evaluación de la misma dependencia federal.
Fue en una entrevista con Fernando Crisanto en donde Abdala Dartigues intentó presumir los ‘logros’ de la dependencia y aseguró que su salida obedecía a una invitación para poder encabezar una coordinación nacional de los programas de Bienestar implementados por el Gobierno federal.
Vida Inés Vargas Cuanalo, la nueva delegada federal de la Secretaría de Bienestar, cuenta con un perfil netamente técnico, pues ha ocupado diversos cargos públicos en el Ayuntamiento de Puebla, el gobierno estatal y una coordinación en la propia delegación desde enero de 2021.
La funcionaria federal tiene un doctorado en Administración Pública por parte del Instituto de Administración Pública del Estado de Puebla (IAP), además de una licenciatura en Ciencias Políticas, área en la cual impartió clases en la Maestría de Gobierno y Buena Política de la Universidad Autónoma de Tlaxcala.
En el ámbito de gobierno, estuvo cerca de dos años y medio en Secretaría de la Contraloría del Gobierno del Estado de Puebla, hoy conocida como Función Pública; inicialmente, de agosto a diciembre del 2013, como coordinadora General de Contraloría Social y Apoyo a Órganos Fiscalizadores.
Posteriormente, en la misma dependencia estatal, de diciembre de 2013 a marzo del 2016, trabajó como coordinadora general de Contraloría Social y Gobierno Abierto, y después estuvo unos meses fuera de los cargos públicos.
Fue hasta 2017 que se integró al Ayuntamiento de Puebla, entonces encabezado por Luis Banck Serrato, como subcontralora de Evaluación y Control, puesto en el que se mantuvo desde febrero de ese año hasta octubre de 2018 que finalizó la gestión capitalina del panista; ese mismo año, fue una de los 14 aspirantes a formar parte del Comité de Participación Ciudadana (CPC), del Sistema Estatal Anticorrupción.
Durante el gobierno interino de Guillermo Pacheco Pulido, fungió como coordinadora general de Política Social en la Secretaría de Bienestar del estado, puesto en el que estuvo de febrero a julio del 2019; de agosto a diciembre de ese mismo año se dedicó a la docencia en la Universidad Iberoamericana Puebla, concretamente dentro de la licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública.
En enero del 2020 ingresó a la delegación de la Secretaría del Bienestar como promotora; en la misma dependencia, pero a principios del 2021, fue nombrada coordinadora territorial, puesto que desempeñó hasta este mes; ahora será superdelegada en el estado de Puebla.
