Un tuit del periodista Fabián Gómez Hernández, director de un medio local en Puebla, acusa públicamente a Rosario Orozco Caballero, viuda del exgobernador Miguel Barbosa Huerta y actual diputada federal por Morena en el Distrito XV, junto con la comunicadora Verónica Vélez Macuil, de adeudar sumas importantes de dinero a diversas personas, instando a los afectados a cobrarles directamente en un sitio denominado Allegue en la zona de Angelópolis, donde supuestamente evaden el contacto para evitar confrontaciones incómodas y "malas vibras".
Esta denuncia, publicada en la red social X el 20 de diciembre, se enmarca en un contexto de persistentes señalamientos contra la administración de Barbosa –fallecido en diciembre de 2022–, marcada por escándalos de corrupción como el fraude en la Macro Plaza con recursos públicos, donde Orozco Caballero ha guardado silencio pese a su rol como operadora financiera cercana al régimen. Vélez Macuil, con tres décadas en periodismo y radio, aparece vinculada en la acusación sin detalles específicos sobre las deudas, pero el mensaje sugiere una red de obligaciones pendientes que aprovecha la opulencia de Angelópolis –un desarrollo residencial y comercial emblemático de Puebla, salpicado por fraudes inmobiliarios y robos millonarios– para eludir responsabilidades. Las respuestas al tuit, cargadas de insultos como "arpías, ladronas y corruptas", reflejan el rechazo popular hacia figuras asociadas a Morena y la llamada 4T, amplificando un clima de impunidad donde las viudas y aliadas de exfuncionarios navegan entre la política actual y las sombras del pasado corrupto.
Este episodio resalta la fractura social en Puebla, donde Lomas de Angelópolis simboliza no solo lujo fifí sino un nido de estafas históricas, como las autorizadas bajo gobiernos panistas previos que involucraron a políticos como Rafael Moreno Valle y aliados del PRD en Morelos, dejando a inversores defraudados sin justicia inmediata. La moratoria anunciada por el actual senador Alejandro Armenta por deudas millonarias en proyectos como el CIS Angelópolis subraya el legado financiero tóxico de administraciones pasadas, mientras acusaciones como esta contra Orozco –abogada y humanista autoproclamada– y Vélez Macuil exponen cómo las redes personales persisten en evadir escrutinio, perpetuando un ciclo de desconfianza ciudadana hacia la élite política y mediática en una entidad asolada por desigualdades y escándalos recurrentes.20 de diciembre de 2025 | Redacción EPrensa:

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