Abdi y su Mamitas de pueblo: bailarinas, lluvia y papás felices... con niños presentes
En Olintla, Puebla, el Día del Padre no se celebró con discursos ni entrega de reconocimientos. No. El presidente municipal priista, Abdi Abihud Ramírez Pérez, decidió hacer del festejo una versión serrana del club nocturno Mamitas, con todo y bailarinas eróticas bailando bajo la lluvia... y bajo la mirada atónita de niños y niñas que también asistieron.
La escena parece escrita por un guionista ebrio: una plaza cívica, lluvia torrencial, sombrillas y capas de plástico cubriendo a familias completas mientras en el centro del escenario —frente a banderas patrias y lonas del ayuntamiento— mujeres bailaban con lencería mínima, pagadas por el gobierno municipal como “homenaje” a los papás.
El evento fue convocado por el propio edil, Abdi Ramírez, a través de su cuenta personal de Facebook y las redes oficiales del Ayuntamiento de Olintla. “¡Vénganse pa’ acá! Al rato nos miramos. Un refresquito, un taquito y habrá rifas”, prometía en su publicación con emojis y ortografía improvisada.
Lo que no dijo fue que el "refresquito" venía con show para adultos... aunque con audiencia infantil incluida.
Y como si se tratara de un sketch de mal gusto, el edil apareció previamente portando una máscara de luchador —como si la política fuera un ring y él un personaje de la triple A de la simulación— para felicitar en redes a sus seguidores y convocarlos al evento con tono de compadre.
El resultado fue un lleno total. Ni la lluvia logró frenar la “fiesta” organizada con recursos públicos, en un municipio donde el presupuesto alcanza apenas para cubrir servicios básicos.
Olintla, por cierto, fue uno de los municipios con conflicto poselectoral en 2024: quema de urnas, acusaciones de compra de votos y pobladores que denunciaron fraude en la comunidad de Vicente Guerrero. Pero esa historia ya quedó atrás. Ahora, el alcalde baila sobre las cenizas, mientras las bailarinas hacen lo suyo y la política se convierte en espectáculo de cantina.
Porque en la Sierra Norte de Puebla, al parecer, no hay política sin show... ni show sin escándalo.
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