Tipos del poder: La regidora del maquillaje eterno
Por Carlos Charis
Septiembre de 2025
La regidora del maquillaje eterno no gobierna: preside comisiones que no se reúnen. Su función principal no es legislar ni fiscalizar, sino lucir en eventos públicos como si de una pasarela municipal se tratara. Domina el selfie institucional, la entrega simbólica de cobijas y los discursos con voz temblorosa donde repite que “las mujeres ya estamos haciendo historia”.
Es la reina de las redes sociales del ayuntamiento. Su despacho siempre huele a perfume caro y foto oficial. Su equipo, reducido pero obediente, trabaja más en la edición de historias que en la redacción de propuestas.
La regidora del maquillaje eterno llegó al cargo por cuotas de género, por parentesco con algún operador o por ese viejo método de “acomodar a la comadre”. Desde entonces, no ha perdido una sola sesión de cabildo… pero tampoco ha abierto la boca más allá del saludo protocolario.
Ella cree que empoderarse es salir en los medios, firmar en hojas en blanco y posar junto a quienes sà toman decisiones. Se toma fotos con niñas, con abuelitas, con perros rescatados… y con cada cheque que entrega el DIF, aunque no sea suyo.
Nunca discute. Nunca incomoda. Es parte del decorado institucional. Pero eso sÃ: jamás se le corre el rimel, ni siquiera cuando hay crisis.
En el fondo, no quiere poder. Le basta con la apariencia de tenerlo.
0 Comentarios